La Comisión Europea presenta su hoja de ruta para blindar al continente ante la amenaza de Rusia
INTERNACIONAL
La Unión Europea define su estrategia para «disuadir de manera creíble a sus adversarios y responder ante cualquier agresión» de aquí al año 2030. Así se detalla en la su hoja de ruta para reforzar la defensa presentada este jueves por la Comisión Europea. La agenda ReArm Europe movilizará hasta 800.000 millones de euros para la defensa, según consta en el libro blanco publicado en marzo.
«Las amenazas recientes han demostrado que Europa está en riesgo. Tenemos que proteger a cada ciudadano y cada centímetro cuadrado de nuestro territorio», advirtió la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen. Según el Ejecutivo comunitario, en un plazo de cinco años la UE debe ser capaz de responder al «panorama de amenazas en evolución» al que se enfrenta, especialmente por parte de Rusia.
La alta representante para la Política Exterior y Seguridad de la UE, Kaja Kallas, aseguró que la hoja de ruta respetará la soberanía nacional de los Veintisiete en materia de defensa y que solo ayudará a «cubrir brechas y cumplir con las tareas establecidas por la OTAN». Pese a este enfoque prudente, algunos Estados miembros, como Alemania o Francia, ya han mostrado resistencia ante el creciente papel de la UE en este ámbito.
El documento advierte que «una Rusia militarizada representa una amenaza persistente para la seguridad europea en el futuro previsible», y que aunque los países del bloque incrementen sus presupuestos de defensa, buena parte de ese gasto «sigue siendo abrumadoramente nacional, lo que lleva a una fragmentación, aumento de costos y falta de interoperabilidad». Ante este panorama, la Comisión está instando a los Veintisiete a coordinar sus compras de armamento, con el objetivo de que al menos el 40 % de las adquisiciones de defensa se realicen mediante contratos conjuntos para finales del 2027. Además, la hoja de ruta fija como meta que al menos el 60 % del armamento adquirido provenga de empresas de la UE y de Ucrania para el 2030.
El documento enumera la creación de «proyectos emblemáticos», entre los que destacan el muro de drones, el escudo aéreo y el escudo de defensa espacial. El muro, bautizado como Iniciativa Europea de Defensa contra Drones, debería estar listo para funcionar a finales del 2026 y «plenamente operativo» en el 2027. Contará con «capacidades interoperables contra drones para la detección, el seguimiento y la neutralización» y controlará también «la instrumentalización de la migración, la protección de la infraestructura crítica y el crimen organizado transnacional».
El escudo aéreo constituirá una barrera de «defensa aérea y antimisiles integrado y multinivel», mientras que el escudo de defensa espacial servirá para «reforzar la defensa de los Estados miembros y garantizar la protección y resiliencia de los activos y servicios espaciales». Se prevé el lanzamiento de ambos proyectos para el segundo trimestre del 2026.