Todo sobre la melatonina: de su eficacia para el insomnio a los posibles riesgos cardiovasculares
EL BOTIQUÍN
Una reciente revisión de más de 130.000 casos de insomnio halló que aquellas personas que tomaron melatonina durante un año o más habían aumentado en un 90 % sus probabilidades de tener insuficiencia cardíaca y duplicado su riesgo de muerte por cualquier causa
08 nov 2025 . Actualizado a las 05:00 h.La melatonina es uno de los suplementos más populares para dormir. Se puede conseguir tanto en farmacias como en supermercados, en una amplia variedad de formatos, desde píldoras hasta infusiones o gominolas. Esta gran disponibilidad se ha basado en el hecho de que se trata de una sustancia considerada, en gran medida, segura, dado que el propio organismo humano la produce. Es una hormona naturalmente presente en el cerebro, que juega un papel crucial en los ciclos de sueño y vigilia, si bien su versión comercializada se fabrica de manera sintética.
Pero los últimos datos ponen en duda esta supuesta seguridad del fármaco. Una revisión que se presentará este mes en las Sesiones Científicas del 2025 de la Asociación Americana del Corazón (AHA, por sus siglas en inglés) analizó a más de 130.000 adultos con insomnio que tomaban melatonina y halló que aquellos que la habían consumido todos los días durante más de un año eran más propensos a sufrir insuficiencia cardíaca, así como a ser hospitalizados por ella, y también tenían un mayor riesgo de muerte por otras causas. El estudio, que aún no se ha publicado, tiene limitaciones importantes. Se trata de un análisis de datos que no permite establecer vínculos causales entre fenómenos. Sin embargo, abra la puerta a la evaluación de los riesgos de esta medicación que, aunque está disponible sin receta, no está exenta de provocar efectos adversos.
Qué es la melatonina
La melatonina es una hormona que se produce de manera natural en el cuerpo, en particular, en la glándula pineal, localizada en el cerebro. Esta hormona se libera en función de las condiciones de luz en las que se encuentre un individuo: cuando cae el sol y hay oscuridad, aumenta la melatonina, mientras que su concentración disminuye en la presencia de luz solar. «El pico de melatonina en el cuerpo se produce por la noche y lo que va a hacer es regular nuestros ritmos circadianos para que nos dé el sueño», explica la farmacéutica Paula Briones, vocal de Alimentación del Colegio Oficial de Farmacéuticos de A Coruña (Cofc).
A partir aproximadamente de los 30 años, la producción de melatonina en el organismo comienza a decaer, haciendo que el sueño empeore. Al perder calidad de sueño, también notamos «un daño oxidativo en nuestras células que es mayor, así como un aumento de la inflamación», señala Briones.
En caso de tomar melatonina, es recomendable hacerlo por la noche, para que esté alineada con su función natural. «Es una sustancia moduladora del sistema nervioso y sus efectos van a depender de la hora a la que la tomemos. Si lo hacemos muy lejos del horario de dormir, va a interferir con los ritmos circadianos», explica José Luis Relova Quinteiro, especialista en Neurofisiología Clínica y profesor de Fisiología en la Universidad de Santiago de Compostela.
Hay que tener en cuenta además que, si se la consume junto con alimentos, la melatonina «sube la glucemia y altera el perfil lipídico, sobre todo los triglicéridos. Por eso deberíamos separar la toma de la comida, esperando al menos dos horas después de cenar para tomarla», indica Briones.
Usos del suplemento
Si bien se suele consumir melatonina para combatir el insomnio, cuando este se vuelve crónico, no está indicada. «La única indicación recomendada por las guías actuales para el insomnio es la de la melatonina de liberación prolongada en adultos mayores de 55 años con insomnio primario, es decir, que no está asociado a otra enfermedad, y durante un período máximo de tres meses», apunta el doctor Manuel de Entrambasaguas, coordinador del grupo de trabajo de Insomnio de la Sociedad Española de Sueño (SES).
Esta sustancia es efectiva asimismo para tratar alteraciones de los ciclos de sueño que pueden producirse de manera puntual, como puede ser el caso de los viajeros frecuentes que sufren jetlag, o bien, de las personas que trabajan a turnos. En estos casos, sí puede ser útil recurrir a la versión de liberación rápida del fármaco.
Comercialización en España
La melatonina que podemos encontrar en formato de suplemento en España tiene unos límites estrictos para evitar que su consumo suponga riesgos. «Se vende sin receta por debajo de los dos miligramos por dosis. A partir de ese límite, ya se lo considera un medicamento», explica Paula Briones. La experta señala que la dosis habitual de este fármaco para el tratamiento de los problemas del sueño en los que tiene indicación suele ser de tres miligramos al día, una presentación que se obtiene bajo prescripción medica.
Cabe señalar que, en el caso del suplemento, está totalmente desaconsejado exceder la dosis diaria indicada en el envase. «Siempre debemos tomar la menor dosis eficaz posible, durante le menor tiempo posible. Si llegan dos miligramos, no se debe tomar tres», indica la farmacéutica. Además, aconseja no sobrepasar los 16 episodios de toma de melatonina al año, un límite después del cual la recomendación pasa a ser acudir al médico para una valoración por parte de atención primaria o de la unidad del sueño.
El estudio
En la nueva investigación norteamericana, próxima a publicarse, los científicos examinaron a personas que tomaban melatonina. El análisis se llevó a cabo a partir de una base de datos de 130.000 personas adultas (un 61 % de ellas, mujeres) con insomnio crónico y una edad media de 55 años.
Los investigadores compararon un grupo de individuos que habían tomado melatonina más de un año con otras personas que nunca habían utilizado este tratamiento. Además, se excluyó del análisis a las personas que habían sido diagnosticadas previamente con insuficiencia cardíaca y a las que tomaban otros fármacos para dormir. Descubrieron que aquellos que habían tomado melatonina durante doce meses o más tenían aproximadamente un 90 % más de probabilidades de sufrir insuficiencia cardíaca en un período de cinco años en comparación con los que no la consumían.
Del mismo modo, se vio que los participantes que tomaban melatonina a largo plazo tenían un riesgo 3,5 veces mayor de ser hospitalizadas por insuficiencia cardíaca que los que no consumían esta medicación. También tenían casi el doble de probabilidades de morir por cualquier causa en un plazo de cinco años, con respecto a los que no tomaban melatonina.
Estos descubrimientos resultaron inesperados para los investigadores. «Los suplementos de melatonina se consideran generalmente una opción segura y natural para mejorar el sueño, por lo que fue sorprendente observar un aumento tan constante y significativo de los problemas de salud graves, incluso después de ajustar muchos otros factores de riesgo», dijo en declaraciones a la AHA el doctor Ekenedilichukwu Nnadi, autor principal del estudio y jefe de residentes de medicina interna en el hospital SUNY Downstate/Kings County Primary Care en Brooklyn, Nueva York.
Con todo, los resultados no son concluyentes en cuanto a la melatonina. «Simplemente se ha hallado una asociación en un estudio que tiene algunas limitaciones, porque los grupos analizados no están muy claramente delimitados. Pero el mecanismo de esa asociación no está claro ni tampoco está demostrada una relación directa entre una cosa y la otra. Podría ser que los pacientes tengan un tercer factor en común que explique este riesgo cardiovascular», señala Entrambasaguas.
¿Es seguro tomar melatonina para dormir?
A pesar de lo que se sabe acerca de la melatonina como hormona y del rol que tiene en nuestro descanso, realmente, no existen suficientes datos acerca de su seguridad en tanto fármaco. «Solo se conocen algunos efectos secundarios que se han descrito, pero a los que no se ha dado mucha importancia y es por eso que se comercializa en supermercados», señala Relova.
Algunos de estos efectos adversos pueden incluir problemas anímicos, afectación de la presión arterial o incluso, paradójicamente, problemas con el sueño. «Pero es posible que muchos de estos efectos se acentúen con la toma no prescrita por facultativos, porque la dosificación, en esos casos, puede superar los límites seguros. El fácil acceso puede llevar a que se tome de forma indiscriminada», observa el experto.
Si bien el estudio norteamericano tiene limitaciones y es observacional, los hallazgos plantean la necesidad de ampliar la investigación en torno a esta sustancia, que en muchos casos se consume sin prescripción de manera rutinaria. «Sería necesario validar estos hallazgos con estudios más específicos, con una metodología adecuada para comprobar que realmente existen estos efectos en la salud cardiovascular. De todas maneras, es esperable que algo que se esté tomando de forma crónica sin control tenga repercusión en sistemas del organismo como el cardiovascular o el endocrino», sostiene Relova.
Del otro lado de la ecuación están los riesgos de dormir mal. Estos sí están ampliamente documentados. «Se sabe que dormir menos de seis horas aumenta el riesgo cardiovascular, pero dormir en exceso, más de nueve horas, también es malo para nuestra salud. Luego, problemas como la apnea del sueño multiplican el riesgo de una fibrilación o de desarrollar hipertensión. Dormir mal altera incluso el perfil lipídico», señala Briones. Por tanto, es importante controlar los problemas de sueño, pero los expertos aconsejan acudir al médico en lugar de intentar solucionarlo por cuenta propia con suplementos.
«El problema es que ese complemento alimenticio no tiene estudios de seguridad a largo plazo y no hay un seguimiento, una regulación de qué dosis puede llegar a tomar el usuario ni durante cuánto tiempo, porque nadie lo está vigilando. Y en ese sentido, lo importante sería que esté más regulado el complemento alimentario que se comercializa sin receta», concluye Entranbasaguas.