¿Problemas de visión para conducir por la noche?: así es la ceguera nocturna

Sofía Berardi / L.B. LA VOZ DE LA SALUD

ENFERMEDADES

Quienes padecen ceguera nocturna con frecuencia tienen problemas para conducir, ver las estrellas en una noche clara, caminar a través de un cuarto oscuro o una sala de cine.
Quienes padecen ceguera nocturna con frecuencia tienen problemas para conducir, ver las estrellas en una noche clara, caminar a través de un cuarto oscuro o una sala de cine. I Stock

La miopía nocturna suele manifestarse por la noche en la mayoría de las personas, tengan o no esta condición; no se opera y no es reversible, aunque en casos particulares pueda mejorarse

31 ago 2024 . Actualizado a las 09:29 h.

La retina es el tejido ubicado en la parte posterior del globo ocular. Esta capa convierte las imágenes luminosas en señales nerviosas y las envía al cerebro para que este las procese. Esto quiere decir que, cuanta menos luz haya, menor será la claridad de la imagen que nos devuelva. «La visión nocturna depende de unas células de la retina llamadas bastones. Son los que por la noche trabajan más que los conos, que se quedan inactivos», señala Manuel Díaz Llopis, oftalmólogo y catedrático de Oftalmología de la Universidad de Valencia. 

Los conos trabajan con alta luminosidad y son los que nos permiten ver los colores. Existen tres tipos: sensibles a la luz roja, a la luz azul y a la luz verde. Por el contrario, los bastones funcionan en condiciones de baja iluminación; son muy buenos para distinguir formas y contrastes.

Quienes padecen ceguera nocturna con frecuencia tienen problemas para conducir, ver las estrellas en una noche sin nubes, caminar a través de un cuarto oscuro, una calle poco iluminada o una sala de cine. «Hay que diferenciar ceguera nocturna del empeoramiento "natural" de ver peor por la noche», puntualiza el oftalmólogo. 

No es una enfermedad por sí misma, sino un síntoma que puede indicar la presencia de otro tipo de problema de visión. «La más típica es la retinosis pigmentaria, enfermedad muy frecuente y habitualmente hereditaria, que además cursa con progresiva pérdida de visión cuantitativa y visión "en túnel", es decir, que no se ve por la periferia, solo la zona central», explica Díaz. Además, está asociada a muchas otras patologías oculares como es la degeneración macular, atrofias del nervio óptico o glaucoma.

Por otro lado, señala el experto, está el empeoramiento "normal" por la propia nocturnidad, por el efecto óptico que produce la oscuridad o la noche que induce un efecto óptico de miopía de 0,5 a 1 dioptrías. En otras palabras, «la persona miope de 1, por la noche tiene 1,5 o 2, por eso conduce tan mal y evita conducir. La persona emétrope, que tiene cero dioptrías, por la noche tiene 0,5 o 1 de miopía, y el hipermétrope (quien ve claramente los objetos distantes) de +0,75 se queda en cero al restarle la miopía inducida, con lo cual ve mejor que nadie».

Según el Estudio de la Visión en España 2022, el 80 % de los españoles dice tener algún problema de visión. En términos de comunidades autónomas, para Galicia el porcentaje es casi el mismo: el 81 % sufre de problemas de este tipo y el 37 % padece miopía. Las de mayor incidencia respecto a esta última afección son Canarias, Aragón y Murcia, con un 43 %.

Causas:

  • Cataratas
  • Miopía
  • Uso de ciertos fármacos (por ejemplo, el tratamiento del glaucoma que contrae la pupila)
  • Retinitis pigmentaria (retina dañada provoca ceguera)

Esta patología no se opera y no es reversible, aunque en casos particulares puede mejorarse con las gafas de filtros amarillos polarizados (deben ser de 450 anometros). 

La Dirección General de Tráfico (DGT) brinda algunos consejos a la hora de conducir y expresa que «un buen estado visual garantiza menor riesgo en la carretera, ya que, de noche, la agudeza visual del conductor se reduce hasta un 70 % y el sentido de la profundidad es siete veces menos eficaz. Un conductor con un 50 % de agudeza visual requerirá entre 5 y 100 veces más iluminación para detectar un objeto de noche que un conductor con una agudeza del 100 %». 

«Es mejor que una persona con ceguera nocturna no conduzca, pero si tiene que hacerlo hay filtros especiales como gafas amarillas polarizadas que mejoran la conducción a estas horas. Han de manejarse con más cuidado para evitar accidentes propios o ajenos», concluye Manuel Díaz. 

Recomendaciones de la DGT al conductor con problemas de visión

  • Utilizar gafas o lentes de contacto para conseguir la mejor visión al volante.
  • Si hay necesidad de utilizar gafas “de cerca” es recomendable usar unas gafas progresivas pa­ra observar mejor la información que recibe a través del tablero del vehículo.
  • Si nota dificultades para con­ducir de noche (no distinguir bien las señales, no calcular bien la profundidad, etcétera), evite conducir de noche o cuando haya malas condiciones de luminosidad (llu­via, niebla…).
  • Reduzca la velocidad: al au­mentarla, se reduce el campo de visión
  • Si toma algún fármaco que afecte a su visión, siga los consejos de su médico y evite la conducción nocturna.
  • Si el oftalmólogo, con motivo de una exploración, dilata su pu­pila, no conduzca hasta que no se le pase el efecto de la medicación.
  • Procure conducir por rutas co­nocidas y poco concurridas.
  • Si bien existe el mito de que consumir mayor cantidad de vitamina A y evitar el consumo de alcohol y tabaco puede mejorar la ceguera nocturna, Manuel Díaz lo desmiente. «No sirve para nada».