Nada mejor para terminar un congreso de intenso debate sobre un tema muy serio y de actualidad, como son los riesgos laborales, que retomar fuerzas con una excursión de divulgación cultural. Los asistentes al congreso de la sociedad gallega de prevención de riesgos laborales clausuraron las jornadas que se celebraron esta semana en el campus universitario de Lugo con una visita a la comarca de Lemos. Salieron sobre las nueve de la mañana de la capital lucense. Pazo de Tor, San Vicente y los Escolapios. A su llegada a Monforte comenzaron con una visita guiada por el pazo de Tor. Después se desplazaron hasta la ciudad del Cabe donde tuvieron como guía al experto en historia local Felipe Aira para ver la Torre da Homenaxe, el conjunto monumental de San Vicente do Pino y, posteriormente, los Escolapios (en la imagen). Por la tarde recorrieron la Ribeira Sacra realizando un paseo en catamarán por los cañones del Sil y visitando el santuario de Cadeiras, en la parroquia de Pinol, en Sober. Terminaron su jornada con una parada en la bodega Regina-Viarum. Una buena forma de completar los contenidos teóricos del congreso.
El día grande de la romería del San Mateo, en la parroquia monfortina de A Parte, fue el pasado viernes pero, como todo lo bueno, se acaba, aunque la fiesta continuó y muchos se aprovecharon de eso para seguir con la diversión y acercarse ayer hasta el lugar. El viernes por la noche la romería se prolongó hasta altas horas de la noche. En el campo de la fiesta los romeros y vecinos del pueblo bailaron al ritmo de las orquestas Poceiro y Costa Dorada, y disfrutaron del gran ambiente festivo que aún se respiraba después de una jornada de juerga intensa. Paralelamente, en los prados donde estaban instalados las casetas y las meriendas, se formaba una fiesta alternativa con música, baile y buen ambiente a gusto de los usuarios. Algunos incluso se volvieron a quedar a dormir en el lugar.
Muchas familias y grupos de amigos se acercaron ayer hasta la parroquia de A Parte para continuar con la fiesta en honor al San Mateo. Ayer volvieron a verse las típicas meriendas y sobremesas a la sombra al lado del río, en un ambiente algo más tranquilo que el pasado viernes. Los miembros de la comisión de fiestas de este año, María Yolanda Arango y Ramón López también contrataron actuaciones para la noche de ayer. Así que se volvió a celebrar una verbena, a cargo de la orquesta Poceiro. Así se puso fin a esta edición del San Mateo. Ahora toca recuperarse para el año que viene.