Los altos precios con los que estrenó el 2013 el mercado de la leche bajaron un poco al final de aquel año y han seguido empeorando durante el ejercicio actual. El 2014 no empezó mal, pero las sucesivas bajadas han vuelto a colocar los precios en niveles «ridículos», según el gerente de la cooperativa Lemos. Nada hace sospechar que esta tendencia bajista se vaya a modificar en este último trimestre. La mayor preocupación de los responsables de la cooperativa monfortina es ahora evitar las sanciones por sobreproducción. Para escapar de la supertasa, la entidad está alquilando cuota de productores que no han agotado la suya. José Manuel Rodríguez espera que sus socios se libren de las multas que pueden imponer las autoridades por este concepto.