Con la convocatoria de María Sanjurjo, ya son ocho las jugadoras monfortinas que primero A Pinguela y ahora el Ribeira Sacra han aportado a las selección española en distintas categorías. La primera joven promesa que dio el salto a un combinado nacional fue Noelia Sánchez, que se convirtió en el emblema de la cantera monfortina. Pasó por distintas categorías hasta que debutó en el equipo absoluto, en el que dejó su impronta.
La segunda fue Jennifer Mendoza, que pasó por la concentración permanente -era uno de los talentos con mayor proyección del voleibol español-. Rindió a un gran nivel. Hace años que dejó el voleibol y orientó su carrera hacia el mundo de la fisioterapia.
Otra jugadora que también dejó su impronta fue Sara Díaz. La deportista de O Saviñao pasó por la concentración permanente, mostrando su gran proyección y cualidades. La deportista de O Courel, María José Garrido, se convirtió en referente del voleibol español en las categorías inferiores de A Pinguela. Su evolución y calidad no pasó desapercibida para los técnicos de los grandes equipos de la Superliga Española de voleibol, a algunos de los que dio el salto.
La mejor colocadora
En la primera temporada en la Superliga, el equipo de A Pinguela fichó a la colocadora venezolana Yoraxi Meléan. Fue en este equipo en el que se dio a conocer. Jugó en los mejores clubes de España y fue, si duda, una de las deportistas que marcó la diferencia en la selección española absoluta.
La última monfortina en debutar con el combinado nacional fue Antía Rodríguez.