El Ayuntamiento prepara la clausura de la fosa séptica de Acea Nova
04 jul 2017 . Actualizado a las 05:00 h.El plan de reducción de vertidos impuesto por la Confederación Hidrográfica para autorizar la construcción de la depuradora del puerto seco servirá para acabar con uno de los últimos puntos de vertidos de aguas residuales en el tramo urbano del río Cabe. Las obras las pagarán el Ayuntamiento y la Diputación y permitirán clausurar una fosa séptica situada en el barrio de Carude y transformarla en un pozo de bombeo que envíe los vertidos a la red de saneamiento.
Según la información facilitada ayer por el alcalde, José Tomé, y el concejal de Obras, José Luis Losada, en la presentación de este proyecto, en el tramo urbano del Cabe solo quedan en la actualidad dos puntos de vertidos de aguas residuales sin depurar. El que ahora será eliminado se encuentra en las cercanías de la calle Acea Nova. El otro está aguas abajo del Club Fluvial, a la altura de la calle Caneiro.
En los dos casos se trata de tuberías con instalaciones que evacúan las aguas residuales procedentes de los edificios cercanos y tienen sistemas de decantado rudimentarias. Apenas sirven para reducir un tanto el nivel de contaminación del agua antes de que vayan a parar al río.
Solucionar la situación de la fosa séptica de Carude es especialmente prioritario para el Ayuntamiento porque la población de la calle Acea Nova creció exponencialmente en los últimos años, tras la construcción de un edificio de viviendas y de una urbanización de chalés adosados. El volumen de vertidos que iban a parar al río desde esta fosa séptica era mucho más reducido hace años, pero ahora alcanza unas dimensiones considerables.
El alcalde asegura no tener constancia de que estos vertidos hayan generado ninguna multa de la Confederación Hidrográfica. En todo caso, también asegura que la voluntad del Ayuntamiento es atajarlos cuanto antes. Para los de la calle Caneiro el Ayuntamiento solicitó a la Xunta ayuda económica el año pasado, sin obtener respuesta. Volverémola pedir -dice el alcalde- e agardamos que esta vez nos digan que si».