Los efectos de la campaña contra la avispa del castaño se notarán el año próximo
26 oct 2018 . Actualizado a las 20:51 h.Durante los últimos meses, la Consellería de Medio Rural llevó a cabo un total de 2.589 sueltas del insecto parasitoide Torymus sinensis en el sur lucense para combatir la expansión de la avispilla del castaño, que ha provocado importantes daños -aún sin evaluar- en la actual cosecha. Las intervenciones más numerosas fueron en los municipios de Folgoso do Courel y Quiroga. Según indicó el mencionado departamento en comunicaciones enviadas a los alcaldes, las sueltas se realizaron en función de la cantidad de puntos donde se detectó la presencia de la especie invasora y del nivel de infestación registrado en cada lugar.
El efecto de estas sueltas no se percibirá hasta la primavera, cuando se desarrollen las larvas de la avispilla, que anidan en los brotes de los castaños. Es entonces cuando son atacadas por las larvas de Torymus. No obstante, los expertos creen que tendrá que pasar más tiempo para que se reduzca el impacto de la avispilla en la producción de castañas. «Calculo que haberá que esperar dous ou tres anos máis para que se vexa unha repercusión positiva destas operacións, tendo en conta a experiencia dos países que levan máis tempo facendo soltas de Torymus, como Italia», señala el ingeniero de montes Antonio Rigueiro, profesor de la USC y director de la Estación Científica do Courel.
Rigueiro opina por otra parte que lo ideal sería que estas sueltas hubiesen empezado antes, pero puntualiza que eso no fue posible debido a las precauciones exigidas por la legislación medioambiental. «O Torymus sinensis tamén é unha especie exótica e había dúbidas sobre se podería afectar á fauna e á biodiversidade local», explica.
El único remedio conocido
Pese a estos recelos iniciales, a su juicio, no queda otro remedio que recurrir a este método, por ser la única forma conocida de luchar contra la avispilla. «Sería peor non facer nada -dice-, porque o que si está comprobado é que esta especie causa graves danos económicos e ecolóxicos, facendo caer a produción de castaña e ameazando a conservación dos soutos, que teñen tamén un valor moi grande desde o punto de vista da biodiversidade».
Por otro lado, Rigueiro apunta que en lugares como el municipio de O Incio se ha podido notar que los ataques de la avispilla afectan menos a los castaños que fueron hibridados para resistir a la enfermedad conocida como la tinta. «Os castiñeiros autóctonos da parroquia de Val do Mao están sufrindo moitísimo este ano debido á avespiña, pero os castiñeiros híbridos que crecen na mesma zona resisten moi ben e incluso teñen unha boa produción», comenta. «É curioso, porque estas árbores foron hibridadas con castiñeiros asiáticos e en principio cabería supoñer que a avespiña, que procede tamén dese continente, podería ter preferencia por elas», apunta. Sin embargo -agrega-, todo parece indicar el insecto prefiere los castaños del país para anidar y alimentarse antes que los ejemplares híbridos.
La lucha biológica parece estar dando buenos resultados en Sober, según el alcalde
Aunque por ahora no han trascendido datos concretos sobre los resultados de las sueltas experimentales de Torymus sinensis realizadas en el sur lucense con anterioridad a la campaña de este año, el alcalde de Sober, Luis Fernández, dice que en este municipio la intervención parece estar teniendo un efecto positivo. «Os técnicos de Medio Rural dixéronnos que as soltas que se levaron a cabo en Sober están funcionando ben e que conseguiron facer retroceder a avespiña na maioría dos lugares onde se fixeron», señala.
Una excepción, dice por otro lado el regidor, fue registrada en el entorno de la localidad de Matamá, en la parroquia de San Martiño de Anllo. «Neste caso parece ser que as soltas non tiveron o mesmo efecto que nos demais lugares e que por algunha razón os ataques da avespiña foron máis virulentos», agrega. Ahora falta por ver los efectos de las últimas sueltas realizadas en Sober, que fueron 120 en total.