¿Cómo afectó el fuego a los animales más pequeños de O Courel?

Francisco Albo
francisco albo QUIROGA / LA VOZ

LEMOS

Un souto quemado en torno a la aldea de Vilar. En las masas de árboles frondos, según los expertos, se han producido mayores pérdidas de fauna de pequeño tamaño que los pinares
Un souto quemado en torno a la aldea de Vilar. En las masas de árboles frondos, según los expertos, se han producido mayores pérdidas de fauna de pequeño tamaño que los pinares ALBERTO LOPEZ

Un equipo de biólogos evaluará el impacto de los incendios en este tipo de fauna

01 sep 2022 . Actualizado a las 05:00 h.

Entre los daños causados por los incendios forestales del pasado julio en la sierra de O Courel figura sin duda la destrucción de millones de animales de pequeño tamaño, pero de gran importancia medioambiental. Los efectos del fuego sobre esta fauna aún no se evaluaron, por lo que no se sabe todavía si será preciso tomar medidas para favorecer su conservación y ayudar con ello a la restauración de los ecosistemas. De esta labor se encargará —junto con otros expertos— el biólogo Adolfo Cordero Rivera, catedrático de la Universidade de Vigo, quien forma parte de la comisión de la comisión multidisciplinar creada por la Xunta a principios de agosto para diseñar un plan de recuperación de la sierra.

Cordero señala que aún no tuvo la oportunidad de observar sobre el terreno el impacto de los incendios en la fauna, pero apunta que los animales más afectados probablemente han sido los pequeños reptiles —como lagartos y lagartijas—, que son más vulnerables ante estos siniestros. «Cabe a posibilidade de que nas áreas máis afectadas desaparecesen completamente algunhas especies», explica. «Se comprobamos que foi así, estudaremos a posibilidade de repoboar esas zonas con exemplares traídos doutras partes da serra que se salvaron do lume», explica.

Insectos y anfibios

Por lo que respecta a los invertebrados, el biólogo señala que los más perjudicados por los incendios son habitualmente los insectos terrestres, como las hormigas, los coleópteros —escarabajos— o los ortópteros, es decir, saltamontes y cigarras. Los daños, agrega, seguramente fueron mucho menos graves entre los insectos voladores, en especial entre los que frecuentan los cursos de agua, como es el caso de las libélulas.

Cordero estudiará también el efecto de los fuegos en las diferentes especies de anfibios, como ranas, sapos y salamandras. «Mentres non fagamos observacións directas non podemos saber se houbo moita afectación entre os anfibios, pero estes animais están presentes sobre todo nas zonas máis húmidas, que resisten mellor os incendios», comenta. Por otra parte, el biólogo puntualiza que las actuaciones en la que tomarán parte él y otros especialistas se halla en un estado muy inicial. «Por agora só tivemos unha reunión e en setembro haberá outra para ir concretando máis o que se fará», dice.

Menores pérdidas en los pinares que en los bosques de especies frondosas y los matorrales

Aunque todavía no se han realizado observaciones sobre el terreno, según afirma Adolfo Cordero, se puede esperar que los efectos destructivos de los incendios forestales en los animales de pequeño tamaño hayan sido considerablemente menos importantes en las áreas cubiertas de pinares, pese a que estas son las que ardieron con mayor intensidad. «A razón é que esas zonas teñen sempre unha fauna moito máis pobre», explica. Los mayores daños, agrega, seguramente se han registrado en las áreas de bosque autóctono y de matorral, que albergan una mayor biodiversidad vegetal y animal.

En cuanto a las posibles actuaciones sobre la fauna, el biólogo señala que —si se considera necesario emprenderlas—, tendrán que llevarse cabo después de se inicien otras acciones para restaurar la vegetación. «O primeiro de todo será tomar medidas para impedir que as chuvias erosionen os terreos que quedaron desprotexidos ao desaparecer a cuberta vexetal e despois haberá que rexenerar a vexetación da forma que decidan os especialistas que se ocuparán diso», señala.

Cordero dice además que la regeneración de la vegetación y la fauna se producirá en gran parte por si sola en unos pocos años. «En certos casos haberá que intervir, pero moitas especies vexetais e animais recuperaranse sen axuda humana», concluye.