
Las obras iniciadas en Ribas Altas no obtienen licencia autonómica para extenderlas a la calle Morín
21 feb 2023 . Actualizado a las 05:00 h.Las obras de instalación de la nueva tubería de la red general de abastecimiento de agua en Monforte sufren un primer e importante traspiés justo cuando van a cumplirse tres meses de su comienzo. El proyecto fue presentado el pasado mes de agosto por el alcalde, José Tomé, y directivos de la empresa Aqualia, concesionaria de los servicios municipales de agua y saneamiento, que financia su ejecución con cargo a las inversiones comprometidas en la firma de contrato que no llegaron a ejecutarse. Los trabajos comenzaron a finales de noviembre en un tramo donde era suficiente la autorización municipal. La licencia para extender la conducción a la calle Morín, de titularidad autonómica, no se será concedida por ahora.
La instalación de la nueva tubería está presupuestada en 1.700.000 euros y tiene como objetivo evitar que se produzcan cortes en la red general como el que se registró en noviembre del 2017. Una rotura en un tramo que discurre bajo la vía del tren provocó entonces que la totalidad del casco urbano permaneciese sin agua cerca de sesenta horas. Para que no se repitan episodios de ese tipo, Aqualia costeará la instalación de una tubería de fundición —y no de fibrocemento, como al actual— entre los depósitos del monte Cornado y los de San Vicente.
Entre los depósitos más próximos a la captación, en la parroquia de Ribas Altas, y los que abastecen al casco urbano desde lo alto del conjunto monumental hay una distancia aproximada de cinco kilómetros. Las obras comenzaron a medio camino, en un tramo próximo al antiguo campo de fútbol de Ribas Altas, donde bastaba con el permiso municipal para llevarlas a cabo. Su continuidad en dirección al casco urbano, sin embargo, está ahora en entredicho por los problemas surgidos en la calle Morín, travesía urbana de la que es titular la administración autonómica.
Seis meses, plazo teórico
La licencia de obras en este caso no fue concedida. El plazo de ejecución teórico del proyecto es de seis meses, aunque Tomé ya dejó caer en su momento que estaba supeditado a los permisos de otras administraciones. Concretamente, de la Confederación Hidrográfica del Miño-Sil y de la Xunta de Galicia. En este último caso, la delegación territorial de Lugo sostiene que no es que se haya negado el visto bueno para la instalación de la nueva tubería a lo largo de la calle Morín. «Todo o contrario —señala en un comunicado divulgado este lunes—, a Xunta contesta indicando os erros de forma e técnicos nos que incorre o Concello de Monforte na solicitude, para que así se proceda á súa subsanación e se poida outorgar o permiso solicitado».
La contestación a la que se refiere en la nota de prensa corresponde a la solicitud de licencia que formuló ante el servicio provincial de la Axencia Galega de Infraestruturas la empresa redactora del proyecto de instalación de la nueva tubería de la red general de agua en Monforte. Desde la delegación territorial precisan al respecto que es necesario subsanar algunas cuestiones «técnicas» para obtener autorización para las obras en el tramo que discurre por la calle Morín.
Las correcciones pendientes no son pocas. El informe elaborado por la Xunta pone de relieve la existencia de «ata quince indicacións que se deben corrixir ou completar no proxecto de solicitude e autorización de obra». Advierte además que el Regulamento Xeral de Estradas de Galicia determina que se debe solicitar un informe de viabilidad, con carácter vinculante, por parte de la administración titular del dominio público viario afectado por las obras.
Tomé acusa a la administración autonómica de entorpecer un proyecto prioritario
El informe preceptivo al que alude el comunicado de la delegación territorial de la Xunta en Lugo no fue solicitado en este caso, pese a que era necesario por tratarse la calle Morín de un vial de titularidad autonómica. De haberse solicitado en su momento y conforme a la normativa, indican las mismas fuentes, «non se produciría ningún atraso na concesión do permiso». La nota aclaratoria detalla, por otro lado, que este tipo de solicitudes «deben levarse a cabo polo titular ou promotor das obras, e neste caso a solicitude iniciouse a nome do redactor do proxecto».
La delegación territorial de Lugo comunicó esta circunstancia al Ayuntamiento de Monforte, que según recoge el comunicado «xa procedeu á súa corrección». Consultado al respecto, el alcalde lamentó las «maniobras torticeras» con las que a su juicio el Gobierno gallego busca «entorpecer» la gestión municipal en una obra de gran trascendencia. Tomé subrayó, por otro lado, que cuando la Xunta realiza obras en instalaciones de su titularidad en Monforte la licencia la pide la empresa y no la administración autonómica.