El geoparque Montañas do Courel cambia de símbolo coincidiendo con su quinto aniversario

Francisco Albo
francisco albo QUIROGA / LA VOZ

LEMOS

Un letrero con el logotipo actual del geoparque, en el que las personas que no conocen el territorio pueden leer equivocadamente «Montañas do Ourel». El nuevo logotipo debe estar diseñado de manera que no pueda dar pie a una confusión de este tipo
Un letrero con el logotipo actual del geoparque, en el que las personas que no conocen el territorio pueden leer equivocadamente «Montañas do Ourel». El nuevo logotipo debe estar diseñado de manera que no pueda dar pie a una confusión de este tipo ALBERTO LOPEZ

La entidad busca un logotipo adaptado a la nueva normativa de la Unesco

13 abr 2024 . Actualizado a las 05:05 h.

El geoparque Montañas do Courel convocó un concurso para elegir un nuevo logotipo que sirva de imagen corporativa de este territorio. La iniciativa coincide con el quinto aniversario de su reconocimiento por la Unesco, que se hizo efectiva a mediados de abril del 2019. Pero la renovación de imagen no está relacionada con esta efeméride, sino con la nueva normativa del organismo internacional, aprobada en septiembre del año pasado. «La Unesco no quiere ahora que su emblema figure en los logotipos de las entidades que patrocina, como los geoparques o los lugares incluidos en la lista del patrimonio de la humanidad», explica Martín Alemparte, gerente del grupo de desarrollo rural Ribeira Sacra-Courel y coordinador del geoparque.

El motivo es que estos logotipos —como ocurre con el de Montañas do Courel, que hasta ahora incluía el símbolo de la Unesco— son utilizados con frecuencia por empresas radicadas en estos territorios y aparecen en el etiquetaje y la publicidad de productos elaborados en ellos. «Lo que desaprueba la Unesco es que su símbolo figure en estos contextos y que parezca que está patrocinando firmas y productos comerciales», señala Alemparte. Por este motivo, el nuevo logotipo del geoparque Montañas do Courel no incluirá el emblema oficial de la Unesco, aunque podrá seguir siendo utilizado por empresas de los municipios de Quiroga, Ribas de Sil y Folgoso do Courel para indicar su pertenencia a este territorio.

Otro motivo para la renovación del símbolo del geoparque es la intención de evitar confusiones entre las personas que no conocen el territorio. El diseño del logotipo actual incluye una representación estilizada del sinclinal de Campodola-Leixazós, de manera que la figura del plegamiento ocupa el lugar de la letra inicial de la palabra Courel. «Los que vivimos aquí vemos al momento cómo hay que interpretar el logotipo, pero otras personas no se dan cuenta de que el diseño del pliegue corresponde a una letra y lo que leen es ‘Montañas do Ourel», señala a este respecto Alemparte.

Por esta razón, en el concurso para elegir el nuevo logotipo se exige que el diseño incluya el texto «Montañas do Courel» de una forma que sea claramente legible y que no pueda dar lugar a errores.

El autor del diseño elegido recibirá un premio de mil euros

El plazo de entrega de trabajos del concurso para elegir el nuevo logotipo del geoparque estará abierto hasta el próximo día 29. El autor del diseño elegido recibirá un premio de mil euros y un lote de productos locales. También se reconocerá su autoría de forma expresa durante la Semana Europea de los Geoparques, que se celebrará entre el 17 de mayo y el 2 de junio.

Según las bases, el diseño deberá incluir una referencia gráfica a los plegamientos tumbados de la sierra de O Courel como ya ocurre con el símbolo actual. El logotipo tiene que incluir las palabras «geoparque» y «Montañas do Courel», pero no puede contener la palabra Unesco. La técnica será libre, pero debe facilitar la reproducción del logotipo en cuatricromía, y se valorará que incluya colores que puedan trasladarse fácilmente a la escala de grises para que sea posible reproducirlo tanto en color como en blanco y negro. Las bases del certamen se pueden consultar en la cuenta de Facebook del geoparque.

El logotipo utilizado hasta ahora fue creado en el 2018, antes de la creación del geoparque. Se utilizó por primera vez en unos sobres de azúcar fabricados por una empresa de Ponferrada en los que figuraba la leyenda «Montañas do Courel. Proxecto xeoparque», a petición de los concellos del grupo.

La financiación y la escasez de alojamientos, entre los principales puntos flacos de un lustro de existencia

En sus primeros cinco años de existencia, el geoparque Montañas do Courel —el primero de Galicia hasta la creación del de Ortegal, en mayo del año pasado— ha conseguido un elevado grado de identificación con la población de los tres municipios que lo integran. Ese es el parecer de Roberto Castro, teniente de alcalde de Ribas de Sil y presidente de la asociación Montañas do Courel. «Un dos grandes éxitos que se lograron durante estes anos é que a sociedade sinta o xeoparque como algo seu e que se crease un sentimento de territorio», afirma. La asociación de empresarios y comerciantes de la comarca lleva ahora el nombre del geoparque.

Desde que se produjo el reconocimiento de la Unesco, dice asimismo Castro, se han organizado numerosas actividades de divulgación del patrimonio natural y cultural del territorio, ayudando a reforzarlo como atractivo turístico. «Temos tamén unha rede compartida de museos e centros de interpretación que se complementan entre eles, cada un cunha temática diferente, e os tres concellos deixaron de lado os localismos para promover o xeoparque de forma conxunta», añade.

Entre los puntos débiles del geoparque Montañas do Courel, Roberto Castro señala por otra parte las dificultades para conseguir la financiación necesaria para desarrollar sus actividades. «Temos un presuposto moi pequeno comparado cos que manexan outros xeoparques españois e hai que facer encaixe de bolillos para optimizar os recursos e custear todo o que se fai coa axuda dos concellos, da Deputación e tamén algo que nos chega da Xunta», comenta.

Otra debilidad del geoparque que está pendiente de resolver, a juicio del presidente de la asociación de municipios, es la escasez de alojamientos para acoger a los visitantes del geoparque. «Durante estes primeiros cinco anos houbo unha serie de problemas que seguimos arrastrando e un deles é evidentemente a falta de prazas hostaleiras, pero penso que podemos estar relativamente satisfeitos de todo o que se fixo ata agora entre todos a pesar de contar cuns recursos limitados», concluye.