Crean una comisión para regular la navegación en la Ribeira Sacra

Francisco Albo
fRANCISCO ALBO MONFORTE / LA VOZ

LEMOS

Un momento de la reunión entre responsables de la Confederación Hidrográfica del Miño-Sil y de la Xunta en la que se presentó un estudio técnico y se acordó formar la comisión de seguimiento
Un momento de la reunión entre responsables de la Confederación Hidrográfica del Miño-Sil y de la Xunta en la que se presentó un estudio técnico y se acordó formar la comisión de seguimiento CEDIDA

En el organismo participan la confederación hidrográfica y la Xunta

28 may 2024 . Actualizado a las 22:50 h.

La Confederación Hidrográfica del Miño-Sil (CHMS) constituyó una comisión de seguimiento para la ordenación de la navegación y el atraque en el ámbito de la Ribeira Sacra. Este órgano quedó constituido en una reunión mantenida entre el presidente de la CHMS, José Antonio Quiroga; el comisario adjunto de esta entidad, Alberto de Anta; el director de la agencia Turismo de Galicia, Xosé Manuel Merelles; la directora de Patrimonio Natural, Marisol Díaz; y el subdirector de Conservación e Restauración de Patrimonio Cultural, Manuel Chaín.

En el curso de este encuentro se dio cuenta de un estudio sobre la navegación y al atraque en la Ribeira Sacra elaborado por la confederación hidrográfica, finalizado en diciembre del 2023. Según afirma Quiroga, en la reunión se puso de manifiesto la importancia de este trabajo —que calificó de «análisis exhaustivo»— ante la «situación actual de desorden y caos que impera en esta emblemática zona».

En el encuentro, además de exponer el referido estudio y de establecer una mesa de diálogo —apuntan los responsables de la CHMS— se constituyó la comisión de seguimiento, cuya finalidad será de la «velar por el cumplimiento de las soluciones acordadas a nivel técnico, cuyo objetivo último es armonizar el uso sostenible del río con el valor paisajístico y patrimonial de la Ribeira Sacra, imprescindible para una nueva candidatura a patrimonio de la humanidad». Los representantes de la confederación hidrográfica y la administración autonómica se comprometieron a mantener en fechas próximas nuevas reuniones a nivel técnico «con el interés de concluir las soluciones para esta zona protegida, de referencia a nivel mundial, en la que el turismo constituye un recurso económico fundamental», según apuntó Quiroga.

A comienzos del pasado julio, la CHMS anunció que había contratado con una consultora especializada la realización del estudio técnico sobre el estado actual de los embarcaderos y las navegación en este territorio. El trabajo fue elaborado con la finalidad de que sirva de base para establecer un plan regulador de estas actividades. Para preparar esta normativa, precisó asimismo la entidad, debería formarse una comisión en la que tendrían que participar la consellerías de Medio Ambiente, Patrimonio y la agencia Turismo de Galicia.

Una iniciativa que arrancó con la suspensión de permisos para nuevos pantalanes

Los primeros pasos para regular la navegación en la Ribeira Sacra se dieron en diciembre del 2002, cuando la Confederación Hidrográfica del Miño-Sil suspendió temporalmente la concesión de permisos para instalar nuevos embarcaderos en este territorio. Según apuntó por entonces el presidente de la entidad, la proliferación de plataformas de atraque y de embarcaciones estaba alcanzando unas dimensiones preocupantes, por lo que se consideraba necesario unificar criterios entre las diferentes administraciones a fin de poner orden en este aspecto.

El plan regulador que se pretende elaborar —señalaron más adelante desde la confederación hidrográfica — tendrá el objetivo de impedir el deterioro del dominio público hidráulico y de los ecosistemas asociados. De acuerdo con las previsiones de los responsables de la entidad, la normativa que regulará estas actividades no solo afectará a la instalación de embarcaderos, sino que también establecerá límites para la velocidad y el ruido de las embarcaciones. La iniciativa, añaden, pretende ayudar a fomentar en la Ribeira Sacra un tipo de turismo «no invasivo y sostenible».