El mal tiempo acelera el destrozo de la calzada de la carretera N-120

Carlos Cortés
Carlos Cortés MONFORTE / LA VOZ

LEMOS

Sucesión de baches en la N-120, uno de ellos recién tapado y los otros no, en una fotografía hecha en el puente de Semana Santa
Sucesión de baches en la N-120, uno de ellos recién tapado y los otros no, en una fotografía hecha en el puente de Semana Santa CARLOS CORTÉS

El agua abrió grietas y agrandó baches esta Semana Santa en Quiroga y Ribas de Sil

22 abr 2025 . Actualizado a las 05:05 h.

Las lluvias de esta Semana Santa complican todavía un poco más el estado del tramo de la carretera N-120 que atraviesa la Ribeira Sacra entre Valdeorras y Ourense. El agua acelera el deterioro acumulado y está haciendo aparecer nuevos baches y grietas y agrandando los que ya había. Es un problema general de toda esta carretera, pero probablemente donde es más obvio es entre el casco urbano de Quiroga y el puente de Augas Mestas.

La atención pública está puesta estos días en el mal estado de la N-540, por los cortes de tráfico semanales que se llevan a cabo en Chantada, pero esta carretera no es la única de la red viaria estatal que tiene serios problemas de mantenimiento. La otra carretera nacional de la mitad sur de Lugo, la N-120 (Logroño-Vigo) vuelve a estar muy estropeada en algunos tramos. Lo que ocurre es que en la N-540 está en marcha una inversión millonaria que debería solucionar el problema. En cambio, en la N-120 también está prometido un proyecto de mejora integral, pero ni ha empezado ni se sabe cuándo lo hará.

Las lluvias que cayeron de forma prácticamente continua la mayor parte de esta Semana Santa hicieron más evidente el problema. Sobre todo en los aproximadamente tres kilómetros entre el pueblo de Rairos, en el término municipal de Ribas de Sil, y el puente de Augas Mestas, en Quiroga. Se trata de un tramo con tres carriles en los que el asfalto lleva tiempo visiblemente estropeado. Tras los parcheos más recientes, los usuarios habituales de este tramo saben que tienen que extremar el cuidado sobre todo cuando circulan por el carril lento sentido Monforte.

Ya estaba deteriorado, pero a finales de la semana pasada asomaron baches nuevos y se hicieron más grandes la mayoría de los que ya había. Trabajadores del servicio de mantenimiento de esta carretera pusieron el viernes señalización de peligro y de obras en todo este tramo y ese mismo día taparon los baches más profundos y limpiaron la calzada de los trozos de asfalto roto esparcidos por el paso de vehículos por encima de las grietas.

Una gran inversión anunciada en el 2023 y otra en el 2024

El Ministerio de Transportes anunció en enero del 2023 una inversión de 15,6 millones de euros en la reparación integral y en profundidad de la carretera N-120 entre los puntos kilométricos 472,8 al 535,2. Es el recorrido entre el término municipal de Quiroga, en un punto de la carretera cercano al límite con la comarca de Valdeorras, y seis kilómetros antes de llegar al de Guítara, en el municipio de Pantón. Esos 62 kilómetros son casi todo el recorrido de esta carretera estatal por el sur de Lugo y pasan además por los municipios de A Pobra do Brollón y Monforte.

Pero esos eran los planes del ministerio a principios del 2023. En junio del 2024 ese departamento gubernamental anunciaba una inversión cercana a los 27 millones de euros en la reparación de la mayor parte de los tramos de las carreteras nacionales que pasan por la provincia de Lugo, incluidas la N-120 y la N-540. En ese anuncio no había reparto detallado de la inversión por carreteras, ni una explicación sobre si ese proyecto sustituía al anunciado el año anterior o solo lo complementaba. En todo caso, un año después, en la N-120 no ha empezado todavía ninguna reparación integral.

El recuerdo del gran socavón

Quince coches sufrieron pinchazos, roturas de llantas y otros destrozos el 1 de enero del 2023 tras pasar uno detrás del otro por un gran bache de aproximadamente tres metros cuadrados de superficie que se acababa de abrir en la N-120, en el límite entre los municipios de a Pobra do Brollón y Monforte. Aquel suceso disparó la preocupación por el mal estado de esta carretera y el Ministerio de Transporte no tardó en prometer una inversión ambiciosa para poner fin a años de remiendos y de carencias de mantenimiento. Pero han pasado dos años y lo único que se ha visto en esta carretera son parcheos cuando los baches de hacen muy evidentes.