Un antiguo colador para fabricar queso hallado en el castro de Cereixa

Francisco Albo
francisco albo MONFORTE / LA VOZ

A POBRA DO BROLLÓN

Restos de lo que se supone que es la base de un recipiente para colar leche y elaborar queso
Restos de lo que se supone que es la base de un recipiente para colar leche y elaborar queso CEDIDA

En las recientes excavaciones en el yacimiento de A Pobra do Brollón aparecieron singulares piezas de cerámica

23 sep 2023 . Actualizado a las 10:47 h.

En la última campaña de excavaciones arqueológicas en el castro de San Lourenzo de Cereixa —en A Pobra do Brollón—, desarrollada durante el verano, se hallaron dos singulares piezas que ahora están siendo estudiadas en el laboratorio. Una de ellas consiste en un fragmento de un recipiente de cerámica con agujeros que, según creen los investigadores, es un resto de la base de un recipiente utilizado para la fabricación de quesos. Otras piezas de este tipo, señalan, han sido encontradas anteriormente en yacimientos situados en diversos lugares, —como Polonia o Suiza— y los análisis revelaron que habían sido empleados como coladores para filtrar la leche utilizada en la elaboración de queso. Estos vestigios fueron hallados en el nivel de ocupación castreña del yacimiento, que comprende también un cementerio de la Edad Media.

En las excavaciones también se encontró un fragmento de cerámica que presenta la peculiaridad de estar decorada con pintura. «É un achado moi interesante, porque os castrexos non pintaban as súas cerámicas», señala Xurxo Ayán, director técnico de los trabajos. Los investigadores han barajado la posibilidad de que se trate de una imitación de las cerámicas fenicias, que sí se decoraban con pintura. Otra posibilidad es que esta pieza sea un testimonio de las relaciones de los antiguos habitantes del castro de Cereixa con la Turdetania, una antigua región que se extendía por el valle del Guadalquivir, donde se elaboraban también cerámicas pintadas. El hallazgo puede así abrir una nueva línea de estudio para los investigadores que se ocupan de este yacimiento.

Un hallazgo anterior

Estas piezas recién halladas se suman a otra singular muestra de cerámica que fue desenterrada en el castro de Cereixa en las excavaciones realizadas en el verano del 2021, que consiste en los restos de un horno del tipo conocido como Castromao. El nombre se debe a otra pieza del mismo tipo que fue encontrada con anterioridad en el castro de Castromao, en Celanova.

Aros de bronce y un collar de pasta de vidrio, otros notables hallazgos en el yacimiento

Entre las piezas halladas en las últimas excavaciones del castro de Cereixa figuran además unos aros de bronce que aparecieron en el muro prerromano del antiguo asentamiento. Uno de ellos, que se conserva entero, estaba embutido entre las piedras de la construcción. El otro, que está roto, fue hallado al pie del muro, pero se supone que también estuvo originalmente en su interior.

Los investigadores han notado un paralelismo entre este hallazgo y otro que se realizó en un castro de A Pastoriza, en cuya muralla también se encontraron argollas de bronce. En ambos casos, los investigadores creen que estas piezas metálicas fueron introducidas en los muros con un propósito ritual, posiblemente a modo de ofrenda.

Por otra parte, en la actualidad se sigue estudiando otra pieza arqueológica descubierta el año pasado en el castro de Cereixa, un collar cuyas cuentas se creyó inicialmente que estaban fabricadas en unos casos con hueso y en otros con pasta de vidrio. Un análisis más detallado reveló más tarde que todas las piezas son de pasta de vidrio. Los estudios también han indicado que algunas de las cuentas del collar fueron decoradas con polvo de oro.