Fallece Tito Antonio Varela, experto en antropología biológica y descubridor de un pequeño tesoro arqueológico en Licín

c.c MONFORTE / LA VOZ

O SAVIÑAO


Tito Antonio Varela (en el centro de la mesa) en la presentación del tercer volumen de  Circular polo Saviñao  en Escairón, en diciembre del 2010
Tito Antonio Varela (en el centro de la mesa) en la presentación del tercer volumen de Circular polo Saviñao en Escairón, en diciembre del 2010 CEDIDA

Natural de O Saviñao, halló una valiosa pieza de mármol embutida en un muro de la iglesia de esta localidad

12 abr 2023 . Actualizado a las 20:56 h.

El catedrático de antropología biológica de la Universidade de Santiago Tito Antonio Varela López murió este martes en Escairón a los 80 años de edad. Tito Varela había sido muchos años profesor en la Universidade de Santiago (USC), pero siempre mantuvo estrechos vínculos con O Saviñao, su municipio natal.

Tito Varela fue hasta su jubilación profesor del departamento de Zoología, Genética y Antropología Física de la universidad compostelana, pero además formaba parte de diferentes entidades científicas. Desde 1982 era académico numerario de la Real Academia Galega de Ciencias, como integrante de la sección de Biología y Ciencias de la Salud. Era además uno de los tres académicos supernumerarios con los que cuenta esta academia.

Colaborador habitual en todo tipo de actividades culturales y sociales, la suya era una de las firmas habituales de los sucesivos volúmenes de Circular polo Saviñao, la serie de libros que publica desde hace años el Círculo Saviñao.

En una de sus muy frecuentes visitas a O Saviñao, en el 2003 reparó en un detalle arquitectónico que le llamó la atención en el atrio de la iglesia de Licín y se puso en contacto con expertos que acabaron confirmando que se trataba de todo un hallazgo. Se trataba de una piedra que había pasado inadvertida hasta entonces, pero que resultó ser una pieza de gran valor. «É unha peza interesantísima que debe coidarse como ouro en pano», dijo en aquel momento Felipe Arias, director del Museo do Castro de Viladonga. La pieza en cuestión era una bloque de mármol embutido en uno de los muros exteriores de esta iglesia y que está labrado con motivos decorativos típicos de los últimos tiempos del Imperio Romano y los primeros siglos de la Edad Media.