Preocupación entre los transportistas al cruzar el gasóleo la barrera del euro

D.C.

LUGO

18 sep 2007 . Actualizado a las 02:00 h.

La nueva subida del precio de los carburantes y en especial del gasóleo de automoción, que sobrepasó en algún caso la barrera del euro, supone una nueva vuelta de tuerca para el sector del transporte por carretera de la provincia de Lugo. El incremento del combustible afecta prácticamente a todas las estaciones de servicio, que comenzaron a aplicarlo el sábado pasado y repercute también en los depósitos propios de las empresas del transporte, pese a que al adquirir grandes cantidades, negocian con las petroleras el precio en función de éstas.

El incremento para los transportistas que abonan el litro a un euro supone unos 30 euros en depósito, según el presidente de Aetram, José Luis Crende. Representa alrededor de entre 150 y 180 euros más al mes. Crende insistió en que la situación para el sector es insostenible. Explicó que sería necesario incrementar las tarifas del transporte en un 30% para que el colectivo, especialmente el de los autónomos, dejara de soportar todo el peso sobre sus espaldas. Crende avisó que esta difícil situación para los transportistas posiblemente llevará en el mes de octubre a la confrontación.

En el caso de los tanques propios el aumento representa 0,02 euros en litro, unos seis euros por cada 300 litros.

Según el presidente de Aetram, el incremento del precio de los combustibles pone en la picota a los titulares de unos 3.000 vehículos industriales de la provincia de Lugo, entre los de corto recorrido, reparto y largo recorrido.

Perder dinero

Para Carmen Castelao, la presidenta de Tradime, esta nueva subida viene a agravar la situación del sector, que dijo se esta convirtiendo en insoportable. Castelao admitió la imposibilidad de los transportistas de repercutir la subida en las propias cargadoras. «Las empresas -dijo Castelao- escasamente pueden cubrir gastos en estos momentos y muchas se ven obligadas a empeñar su patrimonio para poder seguir trabajando.

Castelao recordó que la administración está devolviendo a los transportistas 8,14 euros por cada mil litros de gasóleo consumido, con un tope de 50.000 litros, lo que representa al año 407 pesetas «Este dinero -según la presidenta de Tradime- es una ayuda, pero no soluciona ninguno de los problemas que tenemos planteados». Recordó que el transporte está asfixiado, no sólo por la subida constante de los precios del combustible, sino también por la gran cantidad de normativas que son de aplicación, que se une al recorte en los tiempos de conducción. Recordó que estas última directrices están recurridas por la patronal.

Muchos transportistas de largo recorrido aprovechan los viajes para repostar en las estaciones de servicio que les ofrecen mejores precios y contraprestaciones. En la zona de León llenar el depósito de un camión puede resultar 0,02 céntimos menos en litro que otra situada a pocos kilómetros, en la provincia de Lugo, dentro de la misma ruta.