El inquilino más antiguo del vestuario del Azkar se desvinculará del club esta semana. Alberto Riquer, capitán del equipo lucense, alcanzó ayer un acuerdo con la entidad de O Ceao para rescindir su contrato, que finalizaba en junio del 2010.
Riquer firmará el finiquito con el Prone en los próximos días. El madrileño cierra un ciclo de cinco temporadas y media con la casaca del Azkar. «Da un poco de pena después de tanto tiempo- confiesa el ala internacional-, pero vistos los avatares que hemos pasado, era lo mejor para ambas partes».
Alberto Riquer llegó al Prone a mediados de la campaña 2003-2004. Después de una peculiar aventura en el fútbol sala ruso, en las filas del Dinamo de Moscú, el madrileño se convirtió en uno de los fichajes estrella del mercado invernal de un Azkar que no acababa de arrancar en la Liga. Los azulones enderezaron el rumbo y acabaron disputando el primer play off de su historia después de firmar la séptima plaza en la liga regular.
Manolo Vázquez, presidente del Azkar, ya había dejado entrever en junio la posibilidad de que algún jugador con contrato en vigor abandonase la nave antes del arranque del nuevo curso. Una vez confirmada la continuidad del portero Toni, ha sido Riquer el que ha dicho adiós.
«El acuerdo se firmará esta semana», expresa el futbolista. «Ha habido conversaciones desde hace tiempo debido a las dificultades económicas y otras circunstancias que atraviesa el club. Estoy contento porque el acuerdo me da una tranquilidad, ya que en los próximos meses recibiré las cantidades pendientes», apostilla el madrileño.
En el aire
Una vez anunciada la marcha de Riquer, el jugador madrileño, que cumplirá 35 años en octubre, busca nuevo destino. «Hay mucha gente en mi situación, porque todo se cierra más tarde en estos últimos años», indica.
Acerca de los motivos de la rescisión de su contrato, el jugador explica que «el Azkar siempre me expresó que yo era muy importante, pero también que existían dificultades económicas». A la pregunta de si su precio puede haber sido el desencadenante de su marcha, el madrileño considera que «eso deberá responderlo el club».
El acuerdo alcanzado entre el Azkar y Riquer propiciará que el jugador cobre parte del año de contrato que le restaba, así como algunos atrasos acumulados esta temporada.