Gorka Azkorra, por el Lugo, y Mikel Arruabarrena, por el Leganés, compiten por ser el máximo goleador de la categoría
01 feb 2011 . Actualizado a las 11:26 h.La lucha por el honor de convertirse en el máximo goleador, ya no sólo del grupo primero, sino de toda la Segunda División B, se ha transformado en un mano a mano entre dos viejos conocidos y antiguos compañeros, allá por sus inicios en esto del mundo futbolístico. Dos productos típicos de la prolífica y señera cantera de Lezama, dos cachorros que no pudieron lograr la transformación total en leones: Gorka Azkorra, por el Lugo, y Mikel Arruabarrena, por el Leganés. Azkorra nació en Sondica, al lado del mismo Bilbao, en enero de 1983. En febrero del mismo año, pero unos cuantos kilómetros más al este, en Tolosa, Guipúzcoa, Arruabarrena. El azar quiso que compartieran fisonomías: altos, rondando el metro noventa (1,88 Arru, como le llaman sus compañeros; 1.92 Azkorra). También el azar, que formaran parte del proyecto para sustituir al último ariete convertido en mítico por la afición de San Mamés: Ismael Urzaiz. «Es cierto que por el juego del Athletic, siempre se ha querido tener una referencia arriba. Ahora lo es Fernando Llorente, con el que también jugué, y me alegro por él. Pero que los tres seamos altos, es casualidad», explica Arruabarrena. «Sí, es casualidad», ratifica Azkorra, que remite a uno de los actuales delanteros de los bilbaínos, Muniain, que no llega al 1,70. Altos y similares Altos, fuertes, rematadores y de ninguna forma torpes con los pies, pese a lo que pueda creerse. Sus carreras vuelven a juntarse unos siete años después de dejar Lezama. «Somos parecidos», apunta Arruabarrena, que dice del que hoy es su rival: «Aun siendo corpulento, se desenvuelve muy bien con el balón. Define fácil». También elogia Gorka: «Es muy buen delantero. Siempre ha demostrado su capacidad para marcar». Llevan 14 goles, aunque alguna jornada sin marcar. Comenzó más fuerte Mikel, se entonó más tarde Gorka. Hoy mantienen un mano a mano que, quieren, redunde en provecho de sus equipos. «Espero que estemos los dos arriba. El Lugo no va a tener problemas», augura Mikel. Su buen hacer hizo que sonaran en recientes quinielas para volver al Athletic. «Es un halago que sirve para tu satisfacción personal», dice Gorka. Arruabarrena asiente: «También nos reivindicamos con goles».