Otro desplazamiento peligroso. El Breogán cayó el miércoles en la cancha del Burgos y esta tarde, a las 18.30 horas, se desplaza a Menorca. Los baleares, recién descendidos, persiguen un billete de regreso a la ACB. Los celestes vuelven al escenario en el que hincaron la rodilla en el play off de hace dos campañas. El objetivo, dar un golpe encima de la mesa como el día en que se alzó el telón de la presente LEB Oro (87-86).
Breogán y Menorca están tejiendo una historia de amor y odio en las últimas campañas. Hace dos cursos, los baleares arrebataron a Umeh a los celestes cuando el nigeriano ya había sido anunciado en el club lucense. Finalmente, ascendieron a la ACB después de apear a los lucenses en cuartos de final. Eliminatoria cargada de tensión, con Ciorciari y Raúl López acaparando muchos de los focos. Con Adrien desatado después de que los gallegos encajasen el segundo revés.
Y dos años más tarde, poco ha cambiado además de los protagonistas. El Menorca le birló a Arteaga al Breogán y ahora, con varias victorias más que los celestes, busca vengarse de la afrenta liderada por Feldeine y Navajas en la primera vuelta.
El conjunto lucense llega tocado en el plano físico. Krabbenhoft no se ha podido entrenar después del choque contra el Burgos, y Sales, Ogirri y Feldeine, pese a que han evolucionado de manera positiva de las dolencias que arrastran, aún no se encuentran al cien por cien.
El Menorca, por su parte, cuenta con la baja de Coppenrath. Para paliarla, el cuadro balear ha contratado a Moncasí. Los de Chema Berrocal deben buscar en el mercado español a todos sus mimbres, ya que la FIBA les prohíbe pescar en aguas extranjeras a causa de sus más que conocidos problemas económicos.
Batalla interior
Una de las claves del choque puede encontrarse en la batalla interior. Arteaga se ha convertido en el referente de los menorquines. El Breogán tratará de elevar la dureza en la pintura no sólo ante los postes, sino ante penetradores como David Navarro o Jorge Jiménez.