Francisco Cacharro, ex presidente de la Diputación, libre en la operación Muralla
30 ene 2015 . Actualizado a las 14:03 h.Fue el espejo en el que durante muchos años se miró el Partido Popular (antes AP) en España para saber cómo se ganan las elecciones. Francisco Cacharro Pardo, presidente de la Diputación de Lugo desde 1983 al 2007, mantiene el estilo directo y contundente que lo caracterizó durante su dilata vida política. Ahora que se ha visto libre de la Operación Muralla (sobreseimiento libre) expresa sin medias tintas, como siempre, su opinión sobre lo que representó para él este caso: «Esto ha sido lo que ha sido, un proceso político de principio a fin».
En esa línea, el ex presidente provincial del PP, ex presidente de la Diputación y ex senador resalta que, al final, todo se quedó en agua de borrajas en lo que a él se refiere: «Mucho registro, mucho salir en los medios de comunicación en toda España y, al final, el parto de los montes». Volviendo al quid del asunto, este veterano de la política, curtido en mil batallas y otras tantas polémicas, señala: «Eran contratos menores y lo sabían desde el principio; me cansé de explicarlo».
Cacharro y su representante legal dejaron claro, cuando llegó el momento, que bajo ninguna circunstancia aceptarían negociar un acuerdo. Por eso, cuando fue oportuno su abogada avisó de que si llegaba el momento de ir a juicio, Cacharro iría a juicio, y si la sentencia suponía una condena, por pequeña que fuera, la recurrirían porque la considerarían injusta. Aceptar un arreglo supondría admitir alguna actuación incorrecta, y a eso Cacharro no estaba dispuesto, según señala; alguien que dedicó tantos años a la gestión pública no podía admitirlo, manifestó. Y su caso fue objeto de sobreseimiento libre. Para él, la Operación Muralla ya es un recuerdo más. La operación se puso en marcha en mayo de 2006, casi cuando Galicia celebraba el Día das Letras. El fiscal llegó a la conclusión de que la actuación de Cacharro fue totalmente correcta, porque podía haber adjudicado los trabajos de manera directa y, sin embargo, lo hizo mediante el procedimiento negociado que suponía ofrecer los proyectos a tres candidatos.
Último acto
Los dos únicos imputados que quedan en este caso fueron citados para esta mañana en la Audiencia Provincial de Lugo. Se trata de quien fue jefe del servicio de Vías y Obras de la Diputación, y socio fundador de Senén Prieto Ingeniería, José Manuel Romay, y el ingeniero José Enrique Cacicedo. A los dos, el fiscal les dejó la pena en sendas multas de 3.650 euros y un año de inhabilitación.
Hasta el momento en que se celebre el acto esta mañana, no había trascendido en qué consistiría. No estaba claro si se trata de una firma en privado de los dos imputados o si la comparecencia se celebrará en la sala de vistas, a puerta abierta y con presencia del fiscal.