Participantes en el proyecto de Castaño y Nogal participaron ayer en una visita a la ciudad herculina
20 ago 2017 . Actualizado a las 05:00 h.Riccardo Parise, vino desde Italia para participar como voluntario en el proyecto que la Asociación Castaño y Nogal está llevando a cabo para recurperar caminos históricos en Galicia, en este caso en Quintá de Cancelada, en el entorno de Os Ancares. Riccardo nació sin brazos, pero eso no le ha impedido hacer nada de lo que se ha propuesto. Tiene la carrera de Relaciones Internacionales y además domina cinco idiomas. «No hay que crear dificultades donde no existen», comenta Riccardo.
El grupo de voluntarios en el proyecto lo completaban, provenientes también de Italia, María Rosaria Maio y Valentina Lilli junto con la segoviana Alicia Hernández. Ayer, se juntaron en el Club Naútico de A Coruña para contar sus experiencia en el programa y conocer un poco la ciudad. «La idea no es solo que participasen en el campo de trabajo sino que también conociesen un poco Galicia», dice Antonio Alvarez González, presidente de la citada Asociación Casaño y Nogal.
El proyecto de rehabilitación de caminos durará hasta finales de este mes. A lo largo del proyecto, los voluntarios realizaron tareas de mantenimiento y debrozamiento de la ruta Quintá-Río Donsal que sigue, por tramos, el antiguo curso del Camino Real de Castilla a Galicia. Las acciones se encuadran dentro de un programa llevado a cabo por la Asociación para rehabilitar zonas de interés turístico y medio ambiental en Galicia. En este sentido, Antonio Alvarez criticó el abandono en el que se encuentran los montes gallegos y también la falta de implicación del sector público en la rehabilitación de este tipo de zonas.El trabajo hecho hasta ahora ha puesto de relieve un patrimonio muy valioso afirma.