La plaza de abastos de Vilalba resurge con tres nuevos negocios: «É un edificio que pode funcionar ben»

Xosé María Palacios Muruais
XOSÉ MARÍA PALACIOS VILALBA / LA VOZ

LUGO

Productores de A Estruga venden dos días por semana en la plaza de abastos vilalbesa
Productores de A Estruga venden dos días por semana en la plaza de abastos vilalbesa PALACIOS

El Concello adjudica a dos pescaderías y a un negocio de productos naturales los locales que sacó a concurso

29 jun 2024 . Actualizado a las 01:12 h.

Tres nuevos negocios se instalarán próximamente en la plaza de abastos de Vilalba. El Concello logró adjudicar los tres puestos que sacó a concurso y que se sortearon esta semana en la casa consistorial. Dos pescaderías, una de las cuales tiene ya un local abierto en la capital chairega, y un negocio de productos naturales impulsado por una empresa vilalbesa darán más vida al recinto.

Que tres empresas pasen a vender sus productos en el mercado de Vilalba supondrá un aumento de la oferta de más del cien por cien. Ahora solo dos negocios (un pescadero de Lugo y la sociedad agroecológica A Estruga, formada por productores locales) acuden al recinto los días de mercado, martes y viernes. La alcaldesa, Marta Rouco, se mostró este jueves convencida de las posibilidades de la plaza de abastos: «É un edificio que pode funcionar ben», dijo. La llegada de los productores de A Estruga ya fue un avance, puesto que el vendedor de pescados y mariscos pasó años como único vendedor después de que fuesen cerrando otros negocios.

Además del aumento de los puestos, en el edificio se han realizado algunas mejoras recientemente. El Concello hizo trabajos de pintado y colocó papeleras para que las instalaciones estén en las mejores condiciones posibles. El edificio se reformó en la pasada década con un presupuesto de algo más de 200.000 euros, aportados por la Xunta y por el Concello.

Los trabajos consistieron en reformar el sótano, que pasó a albergar los puestos que antes estaban instalados en la planta baja. Se trasladaron los tres negocios que había, y cuando se abrió la zona reformada, se sumaron dos más. No obstante, esa imagen de bonanza empezó a apagarse hasta llegar a quedar solo un vendedor. Ahora, en cambio, empieza a notarse una tendencia contraria.