Toni Nakic, exjugador del Breogán: «Me tocó la reacción de la gente, reconocieron que yo amo el club, amo Lugo»

Toni Nakic (Sibenik, 1999) ha terminado su etapa de tres temporadas en el Breogán consiguiendo tres permanencias en la ACB y una participación en la Basketball Champions League (BCL). Un jugador extemporáneo, de los que más y mejor entienden el juego, de los que entienden más de ventajas que de velocidad y de fuerza. Un icono ya para el Breogán. Un jugador que se adaptó en Lugo a una posición diferente a la habitual, que era alero. Un tipo sencillo, extraordinario. 

 - ¿Cómo se siente después de despedirse del Breogán tras tres temporadas?

 -¡Siento tanta emoción! Fue duro cuando me despedí de algunos amigos con los que estuve tres años, pero cuando el Breogán publicó el mensaje y cuando recibí muchos mensajes en redes sociales y vi comentarios en los perfiles del Breogán fue muy emocionante para mí. Me tocó, me tocó. Vi que la gente reconocía que di lo mejor de mí en el Breogán. La gente reconoció que yo amo el club, amo la ciudad de Lugo. Y eso significa mucho para mí porque no soy un chico que mostrase muchas emociones o que estaba mucho en redes sociales. Estoy realmente feliz y orgulloso por la respuesta de la gente. 

 - ¿Cómo fue el proceso previo a decidir dejar el Breogán?

 -Estábamos hablando desde el final de temporada y durante las últimas semanas de la temporada. Les dije que no estaba diciendo que no. El entrenador me preguntó si quería, el entrenador me preguntó si quería cambiar la temporada siguiente porque llevaba tres años en Lugo. Le dije que no quería ir a algún otro sitio solo por ir porque me gusta Lugo y el Breogán, pero si surgía una oportunidad de ir a un buen club para dar un paso adelante o algo así me gustaría hacerlo y que iba a esperar un poco porque había sido el primero en renovar, una vez en marzo y otra vez a finales de mayo o principios de junio. Cuando decidí que no quería quedarme, llamé primero a Tito (Díaz) y se lo dije primeramente yo porque no sabía si el agente se lo había dicho y no quería que se enterara de alguna otra manera. Él lo entendió y dijo que contactaría con Marcos (Fernández) y Héctor (González) para hacer la publicación de despedida.

 - ¿Sabía en el partido contra el Gran Canaria en el Pazo que iba a ser su último partido con el Breogán en Lugo?

 - Tenía en mente que existía la posibilidad de que fuese mi último partido, pero en ese momento no estaba seguro. Todavía lo estaba pensando. 

 - ¿Qué sentía cuando en ese partido la afición le pedía que se quedase y cuando tantos y tantos aficionados le esperaron a la salida del Pazo?

 - En ese momento pensaba que quería quedarme. Me decía: "No me iré, no iré a ninguna parte". Así me sentí en ese momento. También cuando la gente me estaba preguntando y diciéndome que me quedase no sabía cómo responder. Una parte de mí quiere quedarse y otra parte de mí piensa que lo mejor es cambiar el lugar y todo. Realmente no sé qué les estaba diciendo. Les decía que "veremos" o algo así, algo diplomático. 

 - ¿Qué mensaje tiene para la afición del Breogán después de su reacción a su despedida?

- Decirles que disfruté estas temporadas. Lo digo honestamente. No creo que en otro lugar me sienta así o conecte en el club como lo hice en Lugo, esto es lo que pienso después de todos estos comentarios y mensajes. Estoy orgulloso de mis tres temporadas aquí y solo quiero decir a los aficionados que eso es todo. 

 - ¿Jugar competición europea fue importante en su decisión?

 - Jugar en Europa no es lo primero que estaba buscando. Eso no fue lo primero que busqué.

 - ¿Prefiere jugar como alero o como ala-pívot en el futuro?

- Cuando en Lugo hablé con Luis (Casimiro) y con Tito (Díaz) me estaban considerando para la próxima temporada como un tres. Yo les dije que si fuera mi primera temporada en Lugo me hubiera encantado, amaría jugar en esa posición porque antes siempre estaba jugando de tres, pero ahora después de tres temporadas jugando como un cuatro y desempeñándome en un buen rol es un riesgo para mí volver a la posición de tres. No hay grandes diferencias entre ambas posiciones, pero sí algunas. Si fuera mi primera temporada en el Breogán me encantaría jugar de tres, pero ahora no sé cuánto sentido tiene para mí en esta Liga ACB jugar como tres en una liga donde se corre y se tira. Cuando no hay mucho juego interior me resulta mejor jugar como un cuatro. Pero tal vez en otra liga como la Adriática o Turquía me iría mejor jugando en la posición de tres. No jugué en esas ligas, pero lo digo viendo que ahora la Liga ACB es cada vez más competitiva, con más presión. Hay equipos como Valencia que simplemente corren y tiran. 

 - ¿Cómo se imagina jugando en el Pazo como rival del Breogán?

 - Después de todos estos comentarios y reacciones, sé que me recibirán en un ambiente y una atmósfera positivos. Eso es muy importante para mí porque honestamente esperaba que después de mi anuncio hubiera algo de ansiedad. 

 - ¿Cómo ha sido su vida en la ciudad de Lugo?

 - Vivo una vida más o menos tranquila. Me gusta quedarme en casa, ver películas, leer un libro, aprender español, pero cuando hacía buen tiempo yo estaba por el centro. Me gusta caminar por el centro, tomar un café. Por supuesto, la calidad de la comida en Lugo es de las mejores. Eso seguro. La carne y el pulpo son increíbles. Sé que todo el mundo lo dice, pero los probé mucho y realmente lo digo en serio. 

 - ¿Qué compañeros destaca tanto en la relación personal como en el entendimiento dentro de la pista?

 - Erik (Quintela) seguramente es el mejor compañero de equipo, seguro. Habla, ayuda. Es un tipo increíble. Es uno de los mejores compañeros que he tenido en mi carrera hasta ahora, no solo en Lugo. En cuanto a relación en la cancha, tuve una relación increíble con Stefan (Momirov). Nos entendíamos en la cancha, jugábamos estilos diferentes. Cambiábamos mucho y cuando estábamos juntos en la cancha no había errores. Pero en general trato de ser amable con todos. Con Sani (Aleksandar Aranitovic) tuve una buena relación esta temporada. 

 - ¿Cuáles son los partidos que destacan en su memoria?

 - Seguro que el número uno es contra Andorra en el Pazo (10 de mayo de 2024). El Pazo estaba en ese momento en la cima porque estábamos luchando por la salvación. Me quedo con ese partido incluso por encima de victorias contra el Real Madrid o el Barça.

 - ¿Cómo fue su relación con Tito Díaz en el día a día?

 - Fue increíble porque no sentía que él nos mirase desde una posición superior, desde arriba, sino que teníamos una relación amistosa. Con él puedes hablar de todo. Podemos comentar algo tanto bueno como malo. Tenía la sensación de que siempre podía decirle algo. Si veo que algo no está bien, puedo decírselo y él estará dispuesto a encargarse de ello tanto sobre cuestiones de la cancha como de fuera de la cancha. Y también siento que él podía venir siempre a junto de mí y decirme si hay algo en lo que podía ayudar en el equipo, con los entrenadores o cualquier cuestión. Teníamos ese tipo de relación Tito y yo. Por eso lo llamé el primero y le dije que no me iba a quedar en el Breogán. Tengo respeto por él. 

 - ¿Qué otras personas destaca del club?

 - El número uno es Pablo (Duarte) porque me ayudó mucho en la cancha cuando estaba lesionado, cuando teníamos rehabilitaciones. Con él me siento totalmente seguro, no hay miedo posible. Él es una persona que está disponible las 24 horas del día y es uno de los mayores profesionales que he tenido hasta ahora en mi carrera, pero también me ayudó con cualquier cuestión fuera de la cancha, cuestiones que no son su trabajo. Por ejemplo, si necesitaba ordenar algo o cualquier cuestión. También tuve amigos como los vecinos en el antiguo edificio en el que  estaba. O también amigos en la librería o como Juan o Eva del (bar) Venecia o Giacomo de (la pizzería) Cousa Nostra. Empecé como cliente, pero con el tiempo nos convertimos en amigos.

 - ¿Qué destaca de Èric Vila, su compañero de posición durante esta temporada?

 - No pudimos tener una conexión porque no jugamos tanto juntos. Si yo estaba en la cancha, él estaba en el banquillo. Quizás solo jugamos unos 20 minutos juntos toda la temporada. En cada entreno, cuando estábamos como rivales, siempre tuvimos buena relación sin ninguna pelea, sin ninguna discusión. Tuvimos una relación normal ayudándonos mutuamente a mejorar e intentando entrenar bien.

 - ¿Cómo recuerda a Veljko Mrsic?

 - Lo primero que digo es que le estoy muy agradecido de que me haya dado la oportunidad porque si él no me hubiera traído hasta aquí yo no habría jugado en el Breogán. Si no fuera por él yo no hubiese estado aquí tres temporadas y sin él no hubiese mejorado todo lo que mejoré. Por otro lado, es muy estricto con las reglas. Necesitas saber cuál es tu función en la cancha en defensa y en ataque. Entonces, necesitas adaptarte a esas normas. Me adapté bien y por eso él tenía confianza en mí y yo sentía confianza en mí mismo y sentía su confianza. Había un estilo de juego diferente al de Luis (Casimiro), pero los jugadores son los que tienen que adaptarse. Si no te adaptas, no juegas. Él tenía su sistema. 

 - ¿Cómo es Luis Casimiro?

 - Me gustó su estilo de juego, su filosofía. En la cancha debes darlo todo. Tú puedes cometer un error siempre y cuando seas respetuoso en defensa. No hay problema si fallas un tiro o si haces algo mal. Él te apoyará, él te dará una oportunidad siempre y cuando defiendas. Fue un enfoque diferente al de Veljko. Teníamos ataques más cortos desde la primera opción de tirar a canasta. Los jugadores se relajaron más y, desde entonces, empezamos a jugar mejor en ataque y empezamos a ganar. El cambio nos fue bien en ese momento y se puede ver en los resultados. 

 - ¿Le gustaría que el Breogán jugase la FIBA Europe Cup si no puede competir en BCL?

 - Mi opinión es que no es muy buena competición. No es un mercado del potencial y de la grandeza de la BCL. Los rivales no son tan atractivos. Durante la semana, no sé cuánta gente vendría al Pazo. Y también tienes viajes y esos viajes no son a las ciudades principales. La mayoría de las ciudades y países son las más pequeñas. Puedes ir a Rumanía, a República Checa, incluso más lejos. Y eso es difícil. Cuando la temporada pasada jugamos en la BCL, los viajes fueron duros. Vas siete u ocho veces de viaje y eso es realmente duro. Después, no tienes tiempo para recuperarte porque la ACB te espera y la ACB es lo más importante para el Breogán. Sería muy difícil para el Breogán jugar en la FIBA Europe Cup cuando analizas los pros y los contras. 

 - ¿Deja la puerta abierta para el Breogán en el futuro?

 - ¡Por supuesto, por supuesto, por supuesto! Si hay alguna posibilidad, por supuesto. Intenté dejar la puerta abierta desde mi punto de vista y creo que todo salió bien. 

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