El paso por algunas intersecciones resulta complicado por el escaso espacio o por la falta de amplitud para algunos giros
16 ago 2017 . Actualizado a las 05:00 h.En tiempos de rotondas y de turborrotondas, a algunos conductores, habituados a autovías y a autopistas, los cruces de carreteras pueden sonarles a cosas del pasado. En otras zonas, en cambio, esas intersecciones forman parte del escenario habitual por el que pasan a menudo los automovilistas. Dentro de la comarca chairega, en algunos hace falta tener un cuidado especial, pues la falta de visibilidad o de un espacio algo amplio para maniobrar pueden jugar malas pasadas.
UNA DEMANDA PENDIENTE
Mala visibilidad en Paraxes. En Paraxes (A Pastoriza) confluyen la N-640 y la LU-120, que pocos centenares de metros antes se junta con la LU-122. Estas dos carreteras autonómicas se unen en una rotonda, mientras que la confluencia de la N-640 con la LU-120 tiene lugar en un cruce con poca visibilidad, con una curva cercana que obliga a extremar la precaución, tanto si el conductor circula desde Lugo por la carretera nacional y gira a la izquierda para tomar la autonómica como si circula por esta y toma la nacional hacia Meira o hacia Lugo. El BNG llegó a convocar en ese lugar alguna concentración de protesta por la alta de soluciones para el cruce, en el que no se han tomado medidas. La mejora de la N-640 de Paraxes a Lugo, ahora en ejecución, empieza un poco después y consiste solo en una reparación del firme.
LUCES Y SOMBRAS
O Santo, ángulos rectos al lado de casas. El cruce de O Santo (Vilalba) supone la intersección de la LU-120 con la LU-111 (Rábade-O Santo) y con la LU-121 (O Santo-Moncelos). La confluencia se hace prácticamente en ángulo recto, lo que obliga a realizar giros sin especial amplitud de espacio cerca de viviendas. La situación es especialmente complicada cuando por la zona pasan camiones. En el lugar, escenario de algunos accidentes graves, se realizaron recientes trabajos que consistieron en la mejora del firme y en la construcción de pasos elevados para peatones.
AVANCES
Arneiro y A Pastoriza, lugares más seguros. El cruce de Arneiro (Cospeito) era, hace décadas, un lugar de notable peligro: la confluencia de la carretera LU-120 (Vilalba-Paraxes) con la LU-113 (Rozas-Abadín) se hacía en un punto de poca visibilidad, lo que aumentaba el riesgo para los conductores; hoy, en cambio, en el cruce las carreteras pasan a distinto nivel, con los correspondientes carriles de enlace. El de O Acibreiro (A Pastoriza) es más seguro desde que se construyó, durante el año el año pasado, una rotonda: en el lugar confluye la carretera LU-122 (Paraxes-Vilanova de Lourenzá) con el acceso a parroquias como Aguarda y Álvare y con un acceso al casco urbano. La obra, que incluyó la colocación de bandas rugosas y de señales luminosas, se llevó a cabo después de que en la zona se registrasen bastantes accidentes.