«O rei Juan Carlos non podía pasar á historia como o home dos elefantes de Botswana»
LUGO CIUDAD
Más de cincuenta personas acudieron ayer a la librería Biblos, de Lugo, para participar en una charla-coloquio con el periodista y escritor Fernando Ónega (Mosteiro-Pol, 1947). Las anécdotas y detalles en torno a sus dos últimos libros, Juan Carlos I, el hombre que pudo reinar y Puedo prometer y prometo, mis años con Adolfo Suárez, guiaron un encuentro distendido en el que público se interesó por cuestiones tan diversas como el patrimonio económico, la influencia del caso Urdangarin en la abdicación o la importancia del papel que desempeñó el monarca en el paso de la dictadura a la democracia. «O rei Juan Carlos non podía pasar á historia como o home dos elefantes de Botsuana», comentó Ónega en relación con los motivos que lo llevaron a escribir un libro que recoge numerosos testimonios de quienes vivieron la transición desde puestos relevantes. En la cita también hubo espacio para las confidencias, en las que Ónega «desveló» que la relación del rey Juan Carlos con Corina Zu Xayn-Wittgenstein se rompió hace tiempo, o que desde la Jefatura del Estado no se impulsa la abolición de la ley sálica, que prima al hombre sobre la mujer en los derechos sucesorios, «por miedo a que se abra el melón» del debate entre monarquía o república.
Se mostró preocupado
El autor, que también habló sobre periodismo, y que en su presentación se definió únicamente como «periodista e galego, e non sei por que orde», puso en valor la etapa de la Transición y se mostró preocupado de que hoy en día «cada vez haxa máis xente» que habla mal de ella «por descoñecemento». «A Constitución supuxo un pacto histórico de entendemento entre ideoloxías enfrontadas, que se soldou a base de perdón e de medo», apuntó. A la charla acudieron, entre otros, el alcalde, José López Orozco; o los concejales populares Enrique Rozas y Encarna Amigo.
fernando ónega periodista que dio una charla en la librería biblos