Las caldas de Lugo: seis piscinas en medio de un entorno privilegiado

Lorena García Calvo
Lorena García Calvo LUGO / LA VOZ

LUGO CIUDAD

Cuatro de los vasos serán de agua caliente y dos de fría y tendrán un diseño orgánico. El Concello licitará el proyecto por 923.621 euros

03 may 2021 . Actualizado a las 17:12 h.

A pocos metros del Pazo de Feiras de Lugo y de la pasarela que cruza el río Miño se situarán las llamadas Caldas do Miño, un conjunto de piscinas al aire libre inspiradas en los baños públicos romanos, muy en consonancia con la historia que preside toda la ciudad. Aunque se había hablado de que serían cinco, finalmente el conjunto estará formado por seis piscinas, de las que cuatro serán de agua caliente y dos de fría. No se trata de termas, puesto que no se utilizarán aguas mineromedicinales, sino que será agua de la traída que se calentará por aerotermia, el sistema más eficiente y menos contaminante.

Este miércoles el Concello de Lugo dará el visto bueno para iniciar la licitación de las caldas, que tendrán una inversión máxima de 923.621 euros y un plazo de ejecución de doce meses. Entre los trámites burocráticos y la construcción, se calcula que el complejo pueda entrar en funcionamiento dentro de año y medio, aproximadamente. 

Las seis piscinas ocuparán una superficie de 400 metros cuadrados dentro de una parcela de 84.000 situada junto al Pazo de Feiras. Cada piscina seguirá un diseño orgánico y tendrá una forma y dimensiones diferente, y una profundidad que oscilará entre los 60 y los 90 centímetros. En total, la superficie que ocupará el agua será de unos 150 metros cuadrados. Cada uno de los vasos tendrá un aforo máximo de 50 personas, en condiciones normales.

Las piscinas estarán abiertas a quien desee acudir todo el año, si bien por las noches se les colocará una manta térmica para evitar pérdida de calor y posibles caídas. En el proyecto no consta ningún cierre perimetral del complejo.

Junto a las caldas se construirá un edificio de una planta y con cubierta ajardinada en el que se ubicará la maquinaria de aerotermia y los vestuarios. Todo el complejo se ha diseñado intentando rebajar al mínimo el impacto visual. «Queremos ser tremendamente respectuosos coa zona na que se executan, unha contonra privilexiada», dijo la alcaldesa, Lara Méndez. El proyecto está enmarcado en la estrategia europea Dusi Muramiñae. 

Fondos europeos como herramienta para potenciar la unión de la trama fluvial y la urbana

El proyecto de las caldas de Lugo aúna dos vertientes: por un lado se incrementan las opciones de ocio de los lucenses, y por otro se dota de más servicios las proximidades del río Miño, abundando así en la estrategia que el Concello persigue de acercar la trama urbana y la fluvial.

Para conseguir que, de alguna manera, la ciudad y el Miño se sientan más próximos, el Concello ha recurrido a los fondos europeos y la estrategia Muramiñae. A la hora de mejorar los accesos, se está finalizando la instalación de la pasarela sobre la Nacional VI, y ya está adjudicado el paso subterráneo, que sustituirá al actual y que lo mejorará notablemente.

A mayores, las mejoras en el Camiño Primitivo y la Vía Romana XIX a su paso por el barrio do Carme convertirán en más cómodo y agradable el camino que une el centro de la ciudad y la zona fluvial. A mayores, desde el Concello consideran que la senda ciclista que unirá ocho barrios de la ciudad y que transcurrirá también por la zona del río ayudará a aproximar la urbe al paseo do Miño.

En la zona también se mejorará la Calzada da Ponte, un proyecto que ya tiene el visto bueno de Patrimonio y que ahora está pendiente del okey de la Confederación.

A mayores, a través de programas como el Muramiñae Rehabilita se han impulsado pequeñas intervenciones que han permitido mejorar la imagen del paseo, por el que cada día pasan centenares de lucenses corriendo, en bicicleta o simplemente dando un paseo.