Susan Wojcicki, la casera de Google

MERCADOS

abraldes

Consejera delegada de YouTube, criada en el corazón de Silicon Valley, es uno de los rostros más poderosos de la revolución digital

19 sep 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

Imagínense que acaban de comprarse una casa. Grande. Que hacen números y llegan a la conclusión de que igual podrían alquilar el garaje y un par de habitaciones de su nuevo hogar para obtener unos ingresos extra y que la hipoteca no se les haga tan cuesta arriba. Hasta aquí, nada extraordinario. Sobre todo si hablamos de Estados Unidos, donde esa solución resulta de lo más habitual. Y ahora, imagínense que sus inquilinos resultan ser dos auténticos genios de la tecnología. Y que, a la postre, no solo le ayudan a sufragar el sueño de un nuevo hogar, sino que además, acaba embarcándose con ellos en una aventura que les cambiará a todos la vida. También a usted ¡Y de qué manera!

Pues bien, eso precisamente es lo que le ocurrió a la protagonista de este perfil: Susan Wojcicki (Santa Clara, 1968). Sus inquilinos: Larry Page y Sergey Brin, los fundadores de Google. Y para que no se queden con el gusanillo en el cuerpo, les cuento lo que pagaban por el alquiler del garaje: 1.700 dólares de entonces al mes. Corría el año 1998.

Claro que Wojcicki jugaba con ventaja en eso de reconocer el talento. Seguro que para nosotros no hubiese sido tan fácil. En esa época, la hoy consejera delegada de YouTube trabajaba en Intel. Pero es que, además, se crio en el corazón de Silicon Valley, en una de las zonas más privilegiadas de Estados Unidos. En la residencia de la universidad, para ser más exactos. Su madre, descendiente de judíos rusos, profesora de secundaria; su padre, estadounidense de origen polaco, profesor de Física en la Universidad de Stanford. Así que creció rodeada de talento, inmersa, como sus dos hermanas, en un selecto ambiente académico. En aquella casa había más pasión por la ciencia que por el dinero.

Otro detalle: desde la ventana de su habitación podía ver Wojcicki cuando era niña la sede de Hewlett Packard, entonces la flor y nata del universo tecnológico. En el currículo que tiene colgado en Linkedin la que muchos proclaman la mujer más poderosa de Internet aparecen las universidades de Harvard (cum laude en Historia y Literatura), y sendos másteres en Económicas en Santa Cruz y UCLA, en California. Eso en el capítulo de la educación. En el laboral, solo dos cargos: consejera delegada de YouTube desde febrero del 2014 y responsable de publicidad en Google durante «14 años y 10 meses».

Y otra curiosidad, no solo acabó trabajando para sus inquilinos (fue la primera mujer en un unirse a Google y la empleada número 16 de la compañía) también terminó emparentando con uno de ellos, Brin, que se casó con su hermana Anne, ya entonces al frente de 23andMe, en aquellos momentos una una startup de análisis genético, y hoy todo un referente en ese terreno. Claro que ese matrimonio acabó como el rosario de la aurora por culpa, dijeron, de una joven empleada relacionada con el proyecto de las gafas inteligentes de Google. Pero esa es otra historia. Muy distinta a la de Susan, casada y con cinco hijos. Razón por la cual nunca sale de la oficina después de las seis de la tarde. Lo de cenar en casa es sagrado. No se negocia.

Tiene además Wojcicki un ojo impecable para los negocios. El don de intuir lo que otros no ven. Y si no, aquí tienen el mejor ejemplo: fue ella la que en el 2006 convenció a Page y Brin para que comprasen YouTube. Quién iba a decir que aquella suerte de almacén de vídeos de amorosos gatitos acabaría siendo un negocio redondo. Ella no lo dudó.

.