
La empresa de Boiro Orixe Salgada aprovecha las algas de arribazón para crear bioestimulantes naturales para una agricultura más ecológica
24 ago 2025 . Actualizado a las 05:00 h.Galicia es la comunidad española con más kilómetros de costa y todo lo que se genera en ella tiene potencial como motor económico. La empresa Orixe Salgada aprovecha las algas de arribazón para crear bioestimulantes naturales de alto rendimiento, pensados para una agricultura más ecológica, eficiente y respetuosa con el medio: «Somos unha biotecnolóxica que traballa para aproveitar os compostos bioactivos vexetais a través de técnicas innovadoras que non utilizan química nin altas temperaturas, só procesos físicos», explica Elena Fontán Alende, cofundadora de este proyecto que germinó en el Polo de Emprendemento de Silleda donde conoció a Vinicius del Monte Vidal. Ella es oceanógrafa y él, farmacéutico, «pero aos dous nos move poñer Galicia en valor, desenvolver unha industria con valores, e crear emprego estable e de calidade», añade.
Cuenta que, después de coger muchas ideas de otras industrias, probaron con las algas y descubrieron el gran potencial que tenían. Querían dar solución al problema legal que tienen las de arribazón, «que son un residuo e polo tanto, un problema», y así empezaron a crear el primer bioestimulante de la marca Salgada Bio, un extracto lechuga de mar, que es la especie más abundante de las costas gallegas «e que contén ulvanos e moitas clorofilas, que lles gustan moito ás plantas». Con los procesos físicos que aplican producen nanopartículas que son vehículos para los bioactivos: «Conseguimos que aqueles nutrientes que necesita a planta, cheguen facilmente á célula para que se alimente». Y todo ello sin dejar residuos.
Aseguran que sus productos son tan naturales que hasta se pueden beber y, de hecho, lo primero que hacen al visitar a un cliente es dárselo a probar: «O noso lema é “non lle des á terra o que non te comerías ti”». Y confiesan que sabe a mar.
Fontan y Del Monte son los únicos inversores de Orixe Salgada, aunque en estos momentos han abierto una ronda de inversión. Tienen sede en Boiro y pertenecen al Barbanza Lab; pero la planta de producción la tienen en Cambados. Actualmente, su trabajo está enfocado en la comercialización de productos para el sector agrario y cuentan con clientes fijos que les han acompañado desde su inicio, como las bodegas Paco & Lola o Condes de Albarei. «Gracias a eles podemos demostrar que o noso produto funciona no campo», subraya. También están trabajando con otras empresas del sector primario, como Cultivo Gallego, que hacen agricultura biointensiva.
Su mercado objetivo es el que trabaja en ecológico y vende en Galicia, trabajan con bodegas de la denominación de origen Rioja y colaboran con agricultores de Huelva.
Fontán fue nombrada recientemente en la lista 40 por debajo de 40 de Impulso Agro, una iniciativa de CaixaBank y del Basque Culinary Center, que les abrió la puerta a colaborar con este centro gastronómico en el desarrollo de aditivos, conservantes y productos naturales para la alimentación. Por su parte, Del Monte ha colaborado con la Universidade de Porto para sacar un extracto de algas para cosmética natural de alta calidad; y con el departamento del Inibic investigan probando la eficacia de las nanopartículas enfocadas en patologías de la piel y colaboran con Cetmar.
Además, gracias al Clúster Bioga, con el que hicieron una misión a Brasil, están abriendo mercado, «xa que a nivel mundial, están moi comprometidos co uso de produtos naturais e ecolóxicos». Ahí está su próximo objetivo: lograr contratos en el exterior para poder diversificar sus clientes.