La CB650R y su hermana carenada, la CBR650R, estrenan la última tecnología lanzada por Honda, el embrague electrónico E-Clutch, que permite cambios rápidos y suaves sin tocar la maneta y funciona también como uno normal.
16 jun 2024 . Actualizado a las 05:00 h.En el 2010, Honda presentó la tecnología DCT, que se convirtió en una de las transmisiones de potencia sobre dos ruedas más avanzadas al permitir elegir entre los modos manual y automático. Ahora, la marca del ala dorada vuelve a innovar con el sistema E-Clutch, un sistema que elimina la necesidad de utilizar la maneta de embrague para hacer un cambio, ya sea subiendo o bajando marchas. Lo hemos probado en el primer modelo que lo incorpora, la Honda CB650R, una naked de media cilindrada que renueva también su diseño con el estilo que la marca nipona denomina Neo Sports Café, inspirado en la CB1000R.
Estéticamente se distingue de la versión anterior por un nuevo faro led en ángulo que da la impresión de una gota o lágrima cayendo del manillar. También son diferentes las tomas de refrigeración laterales, que vistas desde la perspectiva del piloto parece como si fueran dos metralletas, al más puro estilo James Bond.
El motor es un tetracilíndrico que entrega 94 CV y sube hasta 12.000 rpm, con un par máximo de 63 Nm. Suena como debe sonar un cuatro cilindros en línea japonés y apenas vibra, como mucho hay un leve hormigueo cuando lo exprimimos un poco. Con 207 kilos en orden de marcha (incluyendo 15,4 litros de combustible) se mueve sin problemas en las carreteras más sinuosas, y su cintura estrecha ayuda a manejarla. Únicamente me pareció un poco duro el asiento, después de una ruta de alrededor de una hora, y también me incomodó un poco el módulo del E-Clutch, que rozaba mi espinilla derecha.
Hablando del embrague eléctrónico, funciona mucho más suave que un quickshifter convencional y es superrápido, aportando mucha diversión en conducción deportiva y (lo que para mí es más importante) seguridad en los adelantamientos. No es necesario usar la maneta de embrague cuando se sale desde parado o cuando se llega a un stop, el sistema gestiona ambas situaciones y elimina la posibilidad de que el motor se cale.
Si el conductor lo desea, puede utilizar la maneta de embrague de forma normal, basta con presionarla y notaremos cómo se endurece. El E-Clutch se reactiva en menos de un segundo si vamos a altas revoluciones y después de 5 segundos a regímenes de motor más bajos. También es posible desactivarlo completamente.
La parte ciclo hace su trabajo, con una horquilla invertida con un tarado firme de fábrica, monoamortiguador con diez ajustes de precarga y pinzas de cuatro pistones mordiendo los dos discos delanteros, con lo que la frenada está garantizada.
E-Clutch: ultracompacto y solo dos kilos
El Honda E-Clutch gestiona el acoplamiento y el desacoplamiento del embrague basándose en parámetros que incluyen la velocidad del vehículo, el ángulo de apertura del acelerador, las revoluciones del motor, la presión en la palanca de cambio, el ángulo del engranaje reductor del motor del embrague, velocidad del eje secundario y marcha engranada. El embrague trabaja mediante una unidad accionadora con dos motores eléctricos situados dentro de la tapa derecha del motor. Cuando el embrague se acopla o desacopla, el avance de encendido y la inyección de gasolina del motor también son controladas, dando como resultado un cambio de marchas preciso y sin brusquedades en cualquier situación.
Junya Ono, Large Project Leader del Honda E-Clutch, destaca que el sistema «está diseñado para ofrecer a los motoristas un nuevo tipo de experiencia que puede hacer la conducción aún más divertida y emocionante. También aporta tranquilidad y confort en conducción urbana o desplazamientos diarios».
El E-Clutch permite al conductor seleccionar el tacto del cambio para ajustar la fuerza requerida sobre la palanca a la hora de seleccionar una marcha. Hay tres niveles disponibles, duro, medio y suave, para subir de marcha, y otros tantos a la hora de reducir, que pueden seleccionarse independientemente. Por ejemplo, durante la prueba realizada ambos estaban inicialmente en el nivel medio y me resultaba cómodo al accionar la palanca con el pie hacia arriba; sin embargo, al bajar de marcha lo notaba un poco brusco y preferí cambiarlo al modo soft. El sistema también recomienda al conductor reducir marcha (mediante un símbolo en el cuadro de instrumentos) si detecta que la motocicleta va en una marcha larga a una cierta velocidad.
El E-Clutch es ultra compacto, pesa solo 2 kilos y físicamente el embrague y el cambio no son diferentes de los de una motocicleta convencional, lo que ayuda a la viabilidad de futuras aplicaciones.