La Pokémon es como una bomba de racimo. Tiene un amplio radio de actuación. Además, el material esparcido puede explotar años después de su lanzamiento. En el sumario hay Flores y un Espiño, concretamente la Finca do Espiño. Según se desprende de los tomos que ya no son secretos, Gerardo Conde Roa cambió al jefe de Urbanismo en Santiago para que, presuntamente, hubiera una mayor comprensión hacia un pelotazo. Más aguas revueltas. Y los que no han sido salpicados lanzan sus redes con proclamas anticorrupción.
El barco y el tren
A Galicia le llegan las borrascas hasta en el extranjero. Incluso había gallegos en el carguero español que se partió en dos en Francia. Seguro que los hay también en la costa británica, azotada también por las olas. Petra, Qumaira, Ruth... Sigue el tren. En sus vagones viajan los fantasmas del cambio climático. Las conferencias de Al Gore. Y el primo de Rajoy.
Los 38.000
Lo de la aldea global, las redes sociales, las decenas de amigos intercontinentales y los tuits que salvan océanos está muy bien. Pero menos virtuales son los casi 38.000 gallegos que viven en Suiza. Los helvéticos votarán el domingo si aprueban una norma para restringir la inmigración. Lo dicho, a Galicia le llegan las tormentas hasta en el extranjero.