«Anatomía de Grey», racismo y coronavirus

Mónica Pérez
Mónica Pérez TI VERÁS

OPINIÓN

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11 jul 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

Con las series que tienen ya numerosas temporadas a sus espaldas, pasa a veces que una parte de la crítica especializada y del público terminan por mirar a veces con cierto desprecio a esa ficción. Es obvio que cuántos más capítulos se acumulan, más posibilidades hay de que las tramas flojeen o que la audiencia no termine de encajar los cambios de actores o el final de determinados personajes muy queridos.

Eso lo saben bien los fieles seguidores de Anatomía de Grey, que han asistido a las salidas de personajes en trágicas circunstancias (y en ocasiones muy traumáticas).

La temporada diecisiete está siendo una tanda de despedidas también. Pero maravilla ver cómo los guionistas han sabido aunar en las tramas el horror que ha supuesto el covid-19 con el activismo más puro que la serie de médicos no ha dejado de reivindicar en las últimas temporadas. Narró de forma magistral el MeToo, y ahora no se ha quedado ajena a la realidad de que el coronavirus ha sido especialmente agresivo con los pacientes de raza negra y otras minorías étnicas, que han sufrido de manera agónica una pandemia que ha atacado a los más débiles sin piedad.

Sin olvidar otra lacra, la del racismo, en unas escenas que sobrecogen y emocionan a partes iguales. Y eso, 380 capítulos después, no es fácil.