La corbata, tirita antes de la herida

M.ª Carmen González Castro
M.ª Carmen González VUELTA Y VUELTA

OPINIÓN

Eduardo Parra | EUROPAPRESS

31 jul 2022 . Actualizado a las 05:00 h.

Prenda de adorno, especialmente masculina, consistente en una banda larga y estrecha de seda u otro tejido adecuado que se coloca alrededor del cuello. Ese es, según la Real Academia, el significado de corbata. Claro que ahora deberá añadir: prenda que está contribuyendo a disparar el consumo energético y, en consecuencia, a acelerar el cambio climático. Pero ¿es realmente así? Porque eso es lo que dio a entender el presidente del Gobierno hace dos días.

En los últimos meses, las facturas de la luz, el gas y las gasolinas se han colocado por las nubes, con el consiguiente impacto en el bolsillo de todos y cada uno de nosotros. Una subida que empieza en la energía acaba trasladándose a todos los sectores (transporte, alimentación...) hasta entrar en un bucle infinito. Ante este panorama, recortar el precio de la energía parece una buena idea para frenar la espiral.

Dice Sánchez que el Gobierno prepara un paquete de medidas para lograr un mayor ahorro y el viernes ya puso sobre la mesa dos muy llamativas: limitar el uso del aire acondicionado y de la calefacción en los negocios y quitarse la corbata cuando sea posible.

Independientemente de que hosteleros y comerciantes tiemblen porque la medida pueda espantar a los clientes; al margen de que, efectivamente, nos pueda apetecer más o menos comer en un restaurante o hacer compras a 27 grados de temperatura, está claro que esta decisión sí va a rebajar el consumo de energía. Ahora bien, lo de quitarse la corbata para rebajar la factura de la luz es más bien poner una tirita antes de la herida. Es un «vamos a quitarnos la corbata, porque no hay quien la aguante a 27 grados».