
Según los especialistas en nutrición es necesario seguir una dieta equilibrada que incluya todos los alimentos presentes en la pirámide nutricional. Cereales, patatas, legumbres o pasta no pueden faltar en su menú. Las legumbres (lenteja, garbanzo, haba, soja, judía o cacahuete), son las que presentan un menor consumo habitual y, cuando suben las temperaturas, desaparecen de la dieta porque «dan calor». Esto debe modificarse porque son importantes en todas las circunstancias y permiten una amplia combinación y gama de elaboración que las convierten en alimentos más frescos.
Una buena opción sería utilizar las que ya están elaboradas en conserva y combinarlas con otros alimentos para preparar ensaladas, con lo que aumentamos el aporte vitamínico, favorecemos la digestibilidad y variamos la dieta. También resulta adecuado complementarlas con cereales y verduras ricos en metionina. Se recomienda tomarlas con vitamina C (un zumo de naranja, fresas, pimiento o arándanos, por ejemplo) porque se favorece la absorción de hierro.
Le proponemos una combinación de ingredientes para un plato muy saludable y sabroso:
Ensalada rica en fibra. Combine garbanzos, habas rojas, pepino, apio, kiwi, pimiento verde y rojo. Aliñe con una vinagreta de cebolla, pimienta negra, cebolleta y tomillo.
Ensalada rica en hierro. Mezcle tomate, gambas, almendras, cebolla, lentejas y garbanzos. Aliñe con limón, orégano y aceite de oliva virgen.
Ensalada marinera. Utilice tomates cherry, brotes de lechuga variados, avellanas, lentejas, langostinos y berberechos. Añada aceite de oliva y vinagre.
Ensalada antioxidante. Elaborada con alubias, lechuga, brotes de soja, aceitunas verdes, aceitunas negras, tomate, arándanos, pimiento rojo, aceite de oliva, limón, orégano y atún.
Combine las legumbres como desee. Añada sus ingredientes favoritos y el aliño que más le guste hasta conseguir el sabor que mejor se adapte a sus preferencias. Seguro que acertará y disfrutará de un plato saludable y equilibrado nutricionalmente.