España-Alemania, una estrategia
OPINIÓN

Entre el 19 y el 23 de octubre tendrá lugar en la ciudad de Fráncfort del Meno la mayor feria anual de libros del mundo, con España como país invitado. El lema de la feria de este año es «Translate. Transfer. Transform». Este lema podría leerse también como un llamamiento a los gobiernos de España y Alemania.
Translate: Para poder traducir adecuadamente es necesario investigar a fondo y adentrarse mentalmente en el mundo del otro. España y Alemania son países con una comprensión mutua. Dialogan entre ellos. Son sus traductores recíprocos para sus respectivos espacios culturales. España no solo es conocedora del sur de Europa, sino también de África e Iberoamérica. Alemania entiende al norte y al este. El 2022 es un año de encuentros intensos al más alto nivel político (cumbre de la OTAN, consultas gubernamentales, feria del libro, visitas oficiales de los reyes de España a Alemania). Es importante que en un mundo centrífugo se construyan puentes para el entendimiento.
Transfer: Las convicciones comunes tienen que trasladarse a una actuación común. En un plan de acción, los gobiernos de España y Alemania, que se reúnen en A Coruña, acordarán muchos proyectos bilaterales. Y esto está bien así. Al mismo tiempo, existen proyectos que son relevantes para ambos países pero que se han quedado parados. Ejemplos son el gasoducto MidCat, como posible contribución a una mayor soberanía europea en el sector energético, o el proyecto armamentístico de defensa aérea FCAS (Future Combat Air System) en el sector de la seguridad.
Ambos países se enfrentan a situaciones políticas de partida que suponen un reto en sí. Alemania se propone hacer frente simultáneamente a varios «cambios de época»: una economía neutral en emisiones de carbono, un abastecimiento con electricidad verde y un cambio de 180 grados en la política de seguridad —sin tener que renunciar al bienestar—. España se encuentra ante un importante año electoral y se enfrenta a grandes retos en la política exterior por sus acuerdos con Argelia y Marruecos para sentar las bases para el futuro abastecimiento energético de Europa.
Transform: Tanto nuestras democracias como Europa necesitan de reformas para seguir manteniendo su capacidad de actuación. España y Alemania deberían asumir más responsabilidad. ¿Por qué? Porque los tiempos actuales lo exigen. Y porque son estos dos países los que son capaces de hacerlo.
Europa ha supuesto hasta hoy para sus estados miembros garantía de paz, bienestar y seguridad. Pero ahora entra en una contradicción peligrosa. Por una parte, Europa formula objetivos ambiciosos que solo se alcanzarán con «más Europa». Por otra parte, observamos un creciente comportamiento nacionalista. Posiblemente, no es solo el clima el que se encuentra en un punto de inflexión, sino también Europa.
España y Alemania podrían ser países impulsores de reformas. En virtud de sus experiencias históricas y sus ordenamientos políticos, pertenecen a los pocos países capaces de llegar a un nuevo equilibrio entre las soluciones integrales planteadas por los gobiernos centrales y las soluciones subsidiarias de los poderes descentralizados. Ambos países aspiran una Europa del centro político, una Europa de la economía social de mercado y una Europa abierta.
Las iniciativas hispano-alemanas podrían suponer un gran impulso para Europa. Comparable con un automóvil híbrido, en el que junto al técnicamente avanzado motor de combustión se instala un motor eléctrico con batería de alto rendimiento para darle más potencia. A todo esto, el lema de España en la Feria del Libro es: Creatividad desbordante. ¡Un reclamo más que apropiado para los tiempos actuales!