Astracanada en el Congreso

César Rodríguez Pérez
César Rodríguez JUEGO DE TRONOS

OPINIÓN

Imagen promocional de la moción de censura de Vox, con Ramón Tamames (tercero por la derecha en primera fila) como candidato a la presidencia del Gobierno
Imagen promocional de la moción de censura de Vox, con Ramón Tamames (tercero por la derecha en primera fila) como candidato a la presidencia del Gobierno

24 feb 2023 . Actualizado a las 05:00 h.

Cuando las academias decidan los premios a la mejor comedia del 2023, no tendrán otra opción que nominar un docureality grabado en directo por las cámaras del Congreso: la esperpéntica moción de censura de Vox y Ramón Tamames, que produce sonrojo ya antes de ser presentada.

¿Por qué? Por inútil (no tiene posibilidad alguna de prosperar, por mucho que el PP haya decidido abstenerse). Por caricaturesca (Abascal no se atrevió a ser otra vez candidato fracasado y reclutó al antaño prestigioso dirigente comunista de 89 años y a Sánchez Dragó). Por ir acompañada de una imaginería caduca (que no aparezca ni una sola mujer en las fotos promocionales lo dice todo). Y por tomarse a pitorreo un asunto tan serio como este mecanismo constitucional para el cambio del presidente del Gobierno.

A cambio del triste espectáculo que nos espera en el palacio de la Carrera de San Jerónimo (es posible que los otros partidos no den ni réplica a Tamames), tendremos varios trending topics, y material para muchas tertulias. ¿Sacaremos algo más? Posiblemente sí. Habrá ciudadanos que se den cuenta de cuál es la aportación real del partido que dice representar a «la España que madruga». Y tal vez logremos desterrar el uso recurrente de la moción de censura mal llamada instrumental como arma política. Solo le salió bien, en 1980, a Felipe González. A los demás les salió el tiro por la culata.