Política e incendios

OPINIÓN

Paco Paredes | EFE

06 jul 2023 . Actualizado a las 05:00 h.

La elaboración del Plan de prevención y defensa contra los incendios forestales de Galicia (Pladiga) obedece, fundamentalmente, a lo dispuesto en la Ley 3/2007, de 9 de abril sobre la materia. Que sufrió una importante modificación el 28 de diciembre del 2017. Dicha ley señala que el medio rural gallego constituye un patrimonio esencial para el desarrollo sostenible de un país, especialmente en Galicia, donde los terrenos de monte constituyen más del 65 % de su superficie y donde integrados con ellos hay 315 municipios con 31.500 núcleos de población, más del 90 % de los mismos con una población inferior a los 500 habitantes.

Las causas que originan los fuegos forestales son de diversa índole: una parte está relacionada con la situación de abandono y progresivo despoblamiento que a lo largo de los últimos decenios ha venido produciéndose en el espacio rural gallego.

La Xunta aprobó la semana pasada el Pladiga 2023, que contempla una nueva clasificación de los tipos de fuego (a, b y c) con sus respectivos modos de atacar las llamas, junto con un «objetivo estadístico» de que la superficie arrasada sea inferior a 19.761.82 hectáreas. Contará con una inversión de casi 200 millones de euros y, en total, de unos 7.000 efectivos propios y de otras Administraciones, como las locales y del Estado.

Inditex es la primera empresa en sumarse al fondo de la Xunta para prevenir los incendios. Destinó 9 millones de euros a un proyecto del que se beneficiarán hasta 118.000 personas en 26 concellos. La iniciativa tendrá una duración de tres años. Ante estas disposiciones contenidas en el Pladiga y las aportaciones de ciertas entidades, como es el caso de Inditex, es de señalar el incumplimiento de las medidas decretadas contra los incendios forestales por las entidades públicas y muy especialmente por las corporaciones locales, lo cual lleva consigo la importante consecuencia de la no cesación de los incendios forestales con el consiguiente peligro para los habitantes de casas situadas en lugares próximos a los montes gallegos.