Problemas de pobres

José Francisco Sánchez Sánchez
Paco Sánchez EN LA CUERDA FLOJA

OPINIÓN

Gerard Magrinya ERC | EFE

18 nov 2023 . Actualizado a las 05:00 h.

Ya no me acuerdo quién definía la ayuda internacional como un sistema para que los pobres de los países ricos enviaran dinero a los ricos de los países pobres. Brillante y, por desgracia, más exacto de lo que nos gustaría. Basta con examinar lo ocurrido con la ayuda europea a Palestina, que se utilizó para excavar túneles por los que no pasaría ni un tren ni un coche, túneles que tampoco sirvieron para sacar a los civiles de la intemperie. Túneles y resorts de lujo para devotos terroristas. Incluso aquí, en España, estamos asistiendo a una operación de esas características: Extremadura, las sufridas Castillas, Andalucía y, por supuesto, Galicia tendrán que pagar la monumental factura que piden los tenderos catalanes y vascos para vender la presidencia. Algunos expertos la calculan en unos cien mil millones de euros. Pero podría ser más abultada o menos, porque, en un alarde de transparencia democrática, desconocemos algunos pactos y el alcance de otros. Los pobres pagando a los ricos, sin que los ricos les ahorren humillación alguna: la foto del carajal del 1-O en la sala de negociaciones, las advertencias públicas al Gobierno para que no se olviden de quién dependen. ¿Era necesario ese matonismo? En fin, les pagaremos. No lo pondrá Sánchez de su bolsillo, sino del nuestro. Porque seguirá achicharrándonos a impuestos —los impuestos son problemas de pobres, que no pueden rehuirlos— y desmejorando los servicios públicos, abrazados, eso sí, a aquellos chavales puros, maravillosos, que luchaban contra la casta y gritaban que no hay pan para tanto chorizo. Nos faltan Goya y una pintura negra que represente al prófugo de la Justicia, al que el Estado busca para… ponerle escolta.