El bulo en sus manos

OPINIÓN

Kevin Lamarque | REUTERS

14 feb 2025 . Actualizado a las 05:00 h.

Esta oda a la conciliación familiar hecha fotografía fue tomada en el despacho oval. El pequeño propietario de estas manitas no se llama X porque no veamos su rostro o porque alguien, no su padre, esté empeñado en proteger su intimidad. Quién sabe si una voz interior dijo «Elon, llámalo X». Si así fue, papá Tesla tomó nota. Puso al niño el nombre de X Æ A-Xii, que luego fue acortado al, ejem, más cariñoso X, idéntico nombre a la fábrica de bulos de papá, que también fabrica coches y cohetes y es el hombre que susurra cosas a Donald Trump. La imagen tendría que derrochar ternura, un padre llevando al caballito a su hijo de 4 años, esas manitas agarrándose a su cara. Pero en la red propiedad de Elon se cuenta que papá Elon en realidad usa a su pequeño X como escudo humano. A saber qué no contará del resto. Lo de menos es que sea mentira. Se dice en X, la red de Elon. Ahí queda por escrito, como todo bulo viviente. Exactamente a la misma altura que cualquier verdad.