Hay que darle una vuelta a la última decisión sobre formación sanitaria
La reciente decisión de suprimir la exigencia de la Educación Secundaria Obligatoria (ESO) para acceder al ciclo de Técnico en Cuidados Auxiliares de Enfermería (TCAE), Técnico en Farmacia y Técnico en Emergencias Sanitarias, permitiendo que los aspirantes validen sus competencias mediante una prueba, suscita un intenso debate sobre la calidad de la formación de los profesionales de la salud. Aunque es positivo brindar oportunidades a aquellos que no han completado la educación secundaria, es pertinente cuestionar si esta medida compromete la preparación necesaria para los futuros técnicos en cuidados auxiliares de enfermería.
El ámbito sanitario demanda una formación robusta que no solo abarque conocimientos técnicos, sino que también incluya una base educativa que favorezca el desarrollo de habilidades como el pensamiento crítico, la comunicación efectiva y la resolución de problemas. La educación secundaria ofrece herramientas esenciales que permiten a los estudiantes enfrentar los desafíos de una formación técnica exigente, y la eliminación de este requisito podría resultar en profesionales menos capacitados, lo que podría comprometer la calidad de la atención al paciente.
Aunque la prueba de competencias propuesta podría servir para evaluar ciertos conocimientos básicos, no está claro si realmente refleja la capacidad de los estudiantes para afrontar las exigencias del ciclo formativo y, posteriormente, las responsabilidades en el ámbito de la salud.
Es fundamental que las autoridades educativas reconsideren esta decisión, buscando un equilibrio entre la accesibilidad y la calidad educativa que asegure una formación adecuada para los futuros profesionales del sector salud. María José Rodríguez Dopazo.
Sí, soy europeo
He pasado la mitad de mi larga vida en mi nativa Cataluña, en Andalucía y, sobre todo, en Madrid; un cuarto más en países europeos y el otro, «gracias a Franco», emigrado en las Américas. Me siento, sobre todo, de la Europa actual, la democrática, de derechos humanos. Por eso apoyo la idea de varios países de hacer una gran manifestación paneuropea que subraye ante el mundo nuestra unión en estos momentos trágicos, en los que a la invasión de Putin se une la tan traicionera como dañina posición de Trump, incluso para su propio país. Martín Segrera.
Una buena noticia
Por fin los cinco millones de españoles que tienen una hipoteca han escuchado una muy buena noticia. El Gobierno socialista les va a pagar el 60 % de su importe. ¡Qué alegría! Para que sigan siendo propietarios de sus viviendas. Esto lo ha anunciado en la prensa la ministra más lista del Gobierno. Dice que ese 60 % lo pagaran todos los españoles que no tengan hipoteca, excepto los que tengan la identidad catalana hasta que se endeuden más. Y luego ya veremos lo que más interesa a los «socialistas». Si es necesario se subirán los impuestos a todos los españoles, menos a los catalanes que se los administran ellos. Si se necesita más para unas cosas y otras despistadas, se pide un crédito a la chinos comunistas que son los que tienen dinero producto de los esclavos. Tendremos que pagarlo con los intereses que pongan. Así que, viva la inteligencia de la ministra aragonesa. Que la Virgen del Pilar la reciba como la patrona de los que se dejan engañar… Máximo de la Peña.