
No le dejan seguir estudiando y ha demostrado que vale
Me dirijo a ustedes con una profunda preocupación y el deseo de visibilizar una situación que considero injusta y que afecta directamente a jóvenes con vocación y ganas de formarse. Mi hijo, Antón Vilares, es un claro ejemplo de cómo la normativa actual en el acceso a la FP superior puede volverse en contra de quienes buscan una segunda oportunidad educativa.
Antón, un joven de 20 años, obtuvo su título de Bachillerato con una nota media discreta, un «cinco y pico». Consciente de que esa vía no le abría las puertas deseadas, decidió redirigir su camino hacia FP. Se matriculó en el ciclo formativo de grado medio de Guía de Medio Natural y Tiempo Libre, donde no solo encontró su vocación, sino que se esforzó al máximo, culminando sus estudios con una sobresaliente media de 8,93. Este éxito reflejaba su madurez, dedicación y el claro interés por el ámbito educativo y social.
Ahora, Antón desea continuar su formación y aplicar al ciclo formativo de grado superior de Educación Infantil, aplicando a los centros Educativos Públicos de A Coruña (IES Ánxel Casal; y la Grande Obra de Atocha). Sin embargo, para nuestra sorpresa y frustración, se le ha denegado el acceso a ambos, basándose exclusivamente en la baja nota media de su Bachillerato. Es decir, a pesar de haber demostrado su valía y compromiso en un ciclo medio, obteniendo una calificación que le permitiría acceder a cualquier ciclo superior sin problemas si no hubiera cursado el Bachillerato, su esfuerzo no se tiene en cuenta. La normativa actual prioriza su título de Bachiller, con su baja nota, por encima de su brillante desempeño en el grado medio, impidiéndole el acceso a la formación pública que desea. Esta situación no solo es un sinsentido pedagógico, sino que resulta profundamente injusta. ¿Cómo es posible que un alumno sea «penalizado» por haber cursado Bachillerato, incluso si sus resultados iniciales no fueron los esperados? ¿No debería valorarse la mejora, el esfuerzo posterior y el éxito demostrado en una formación específica, especialmente cuando esta es una vía de acceso directa a un ciclo superior?
El caso de Antón seguro que no es aislado. Es imperativo que las autoridades educativas revisen esta normativa. Necesitamos un sistema que reconozca el mérito, la evolución del alumno y que no cierre puertas a aquellos que, tras explorar diferentes caminos, encuentran su verdadera vocación y demuestran capacidad y dedicación para seguir formándose. Agradezco la posibilidad de dar voz a esta problemática. Espero que, al dar a conocer este caso, se pueda abrir un debate constructivo y se realicen los cambios necesarios para que ningún alumno más sea penalizado por haber cursado Bachillerato y querer avanzar en su formación. Antonio Vilares. a coruña.
Busco a mi familia
Mi abuelo Antonio López Pomoso era natural de Baiona, hijo de José y Josefa. Llegó a Cuba en 1909 y se estableció en la Habana . Me dirijo a usted con el mayor respeto para pedir ayuda. Mi familia ya ha fallecido y no tengo muchas posibilidades de encontrar a sus descendientes. Quiero acogerme a la LD que vence en octubre y no he podido encontrar datos familiares. Isabel López Yin . la habana.