Rebautizando partidos

Pedro Armas
Pedro Armas A MEDIA VOZ

OPINIÓN

Chema Moya | EFE

22 ago 2025 . Actualizado a las 18:35 h.

En otra época, los partidos se ponían nombres vinculados a su ideología (conservador, liberal, comunista). Ahora se ponen nombres que la ocultan. Se ve que la ideología no da votos. Prima la ambigüedad del nombre y del mensaje. En un momento de caos ideológico, en el cual tiene mucho que ver la manipulación de las redes sociales, cabe hacer un ejercicio de política ficción, para simplificar el asunto. Tomando un término eclesiástico, rebauticemos los partidos de mayor relevancia.

El PP, partido cada vez más tradicionalista, se considera el partido más popular, aunque resulte antipático a la mitad del pueblo. Critica el populismo de otros, cuando es su propia esencia. Lo suyo sería que se denominase Partido de la Formación del Espíritu Nacional (FEN), por lo que incide en el patriotismo y en la conveniencia de frenar esa inmigración que, supuestamente, deteriora la identidad española.

Al centenario PSOE se le han ido cayendo las siglas más ideológicas (socialista, obrero), hasta el punto de que cuesta incluso verlo como un partido socialdemócrata. Por la trayectoria de algunos de sus líderes históricos pareciera que provienen de un partido socio-liberal, y por las preferencias de sus líderes actuales pareciera un partido progresista de nuevo cuño (animalismo, feminismo). Denominarse ahora Partido Social Progresista (PSP) significaría entre todo y nada.

Solo los viejos partidos nacionalistas (PNV, ERC, BNG) expresan la ideología en sus siglas. Los partidos nacionalistas de nueva denominación la diluyen. Así, EH Bildu (Reunir Euskal Herria), debería llamarse Partido Abertzale de Extrema Izquierda (PAEI), por su independentismo radical; y Junts (Juntos por Cataluña) debería ser el Partido Independentista Burgués (PIB), por su secesionismo economicista.

Abundan los partidos con nombres eufemísticos o metafóricos. Ciudadanos, término que pretende englobar a todo el censo electoral, debería llamarse Partido Liberal Españolista (PLE). Compromís podría ser el Partido de la Izquierda Valenciana (PIV). Más País se correspondería con el Partido Ecologista Progresista (PEP). Podemos, de un tiempo a esta parte, sería el Partido Feminista Radical (PFR). Sumar, el Partido de la Izquierda Laborista (PIL). Vox, el Partido Nazi Español (PNE) o, mejor, el partido sin voz, pues debería estar prohibido.