Rechazo por tener una minusvalía
El infierno que muchos vivimos por tener algún tipo de minusvalía, depresión, ansiedad, agorafobia... ya no es solo cuestión de los organismos públicos, entre ellos la sanidad. El gran problema está en la sociedad: algunas personas, por ignorancia y falta de empatía, nos rechazan por ser como somos.
Mi última experiencia ha sido en una peluquería en el mismo edificio en el que vivo, solo tengo que bajar en el ascensor. Pido cita y al día siguiente me envían un wasap que dice: «Mañana no puedo atenderla debido a que mi peluquería no está adecuada a personas con su problema de salud. Es mejor que busque una peluquería adecuada a su minusvalía». Para la anterior propietaria de la misma peluquería jamás tuve un problema de este calibre. Pilar Sánchez. Lugo.
La odisea de aparcar en el hospital de Vigo
Cada mañana, cientos de profesionales del Hospital Álvaro Cunqueiro de Vigo afrontamos un obstáculo que nada tiene que ver con la atención a los pacientes ni con la gestión hospitalaria: el aparcamiento. Lo que debería ser un trámite (llegar al trabajo, aparcar y comenzar la jornada) se ha convertido en una carrera contrarreloj marcada por colas interminables, frustración y pérdida de tiempo.
El hospital cuenta con un aparcamiento público destinado a trabajadores, pero las plazas disponibles son claramente insuficientes. A diario, muchos profesionales debemos esperar entre 30 y 45 minutos para conseguir una plaza. Esto afecta también al propio funcionamiento del hospital. Los retrasos en la llegada a nuestros puestos de trabajo repercute tanto en la atención a los pacientes como en los compañeros del turno anterior, que se ven obligados a prolongar su jornada.
Como alternativa se nos ofrece alquilar una plaza en el aparcamiento privado. Esto es un gasto añadido que muchos no pueden o no quieren asumir, especialmente tratándose de un centro público, donde el acceso al trabajo debería estar garantizado. Helena Losa.
Juan Carlos
Has tenido años malos, con lo de tus relaciones extramatrimoniales y lo que has recibido de tus hermanos los árabes. Pero lo que hiciste en la Transición no fue poco: recibiste a Carrillo y apoyaste la legalización de su partido; recibiste a Tarradellas, a otros nacionalistas, a republicanos que regresaban a España después de estar exiliados, a sindicalistas que estuvieron en la cárcel como Marcelino Camacho o Nicolás Redondo Urbieta...
Pero lo del libro, y sobre todo lo que dices de Letizia, está muy mal. La reina lo está haciendo bien, ahí tienes su actitud en Paiporta, junto a tu hijo Felipe, después de las riadas de Valencia. Ah, la democracia la hemos traído todos, porque otro 1936 nadie lo quería, excepto los de las extremas izquierda y derecha. Lino Mon. Santiago.
Dos aeropuertos son suficientes
En mi opinión y con mi experiencia en viajes en avión, Galicia solo necesita dos aeropuertos: uno en el sur, Vigo, y otro en el norte, Santiago. El de A Coruña podía usarse para transporte de mercancías, mantenimiento y revisión mecánica, o como base militar. Manuel Diz Vázquez. Xinzo de Limia.