Baltar no aceptará que la Xunta cierre o privatice el hospital de Piñor

M. A.

OURENSE

01 may 2010 . Actualizado a las 02:00 h.

De enemigos irreconciliables a compañeros sonrientes. Eladio Fernández se estrenó ayer como militante del PP en un pleno de la Diputación al que llegó junto a los diputados del grupo de gobierno. Entre ellos estaba la alcaldesa de San Cibrao, con la que había mantenido numerosos enfrentamientos cuando él era portavoz socialista en el concello. | santi m. amil

«Se o peche de Piñor fora definitivo este grupo estará con vostedes reivindicando que o hospital ten que seguir funcionando». Así de tajante se mostró ayer José Luis Baltar, presidente de la Diputación, durante el debate de las mocio-nes presentadas por PSOE y BNG en el pleno de ayer sobre el cierre del centro sanitario. Socialistas y nacionalistas agradecieron al máximo responsable de la institución ese posicionamiento pero insistieron en que Baltar también se opusiera a la privatización del hospital y este no les decepcionó. «Debe seguir sendo público», concluyó el presidente. A pesar de todo, Baltar cree que no va a ser necesario movilizarse contra el cierre del hospital Piñor ni contra su privatización porque eso no ocurrirá. «Teñen que comprender que nós temos que crer nas explicacións que nos da o goberno», dijo.

En el PSOE y en el BNG no lo tienen tan claro. El portavoz socialista, Alfredo García, dijo que la Xunta no ha aclarado suficientemente en qué van a consistir las obras y por qué es necesario cerrar el centro mientras estas están en marcha. «Por non contestar a estas preguntas concretas a xente pensa cousas raras», dijo García. Tanto él como el nacionalista Xosé Manuel Fírvida insistieron en que sería posible mantener el hospital abierto para ejecutar las obras previstas. «¿Que sucedería nesta provincia en caso dunha catástrofe ou dun accidente múltiple que obrigase ao ingreso simultáneo de corenta persoas?», se preguntó el portavoz del BNG.

Nada, respondió Plácido Álvarez en nombre del grupo de gobierno. Aunque este precisó que él no es ni la directora xeral ni la conselleira de Sanidade, explicó que, según los datos facilitados por la Xunta, este verano se cerrarán en Ourense menos camas que en ejercicios anteriores aún con el cierre del hospital Piñor. Concretamente, el año pasado en medicina interna fueron 32 y este, 27. También los a nivel general en todos los servicios se cerrarían menos. En el 2009 fueron 97 y este serán, según dijo, 77.

Datos contradictorios

Estos datos contrastan con los facilitados ayer por la comisión de centro del Chou, que eleva el número de camas cerradas a 100. Según aseguran, la primera información recibida de la dirección del complejo hablaba de 88 camas, 71 de ellas en el hospital de Piñor, 12 en pediatría y 5 en lactantes pero «despois da insistencia da comisión de centro polos rumores de máis peches, infórmanos de que a metade da planta de xinecoloxía tamén se vai ver afectada cunha redución de doce camas máis», lamentan a través de un comunicado.

En él los trabajadores denuncian la información «sesgada» que dicen estar recibiendo de la gerencia del Chou e insisten en las consecuencias que tendrán estas medidas. «Poden repercutir negativamente no servizo de urxencias ao verse masificado por non haber espazo suficiente nas unidades de hospitalización e a sobrecarga que van padecer os traballadores cando chegan estes picos asistenciais, sendo, ao final, os cidadáns quen sofren as consecuencias desta xestión errática», dicen en un documento en el que muestran su intención de «denunciar ante a opinión pública» lo que está ocurriendo con la sanidad pública en Ourense.