El 1 de mayo agudiza la división en el sindicalismo ourensano

Rubén Nóvoa Pérez
rubén nóvoa OURENSE / LA VOZ

OURENSE

La CIG llama «cínicos» a CC. OO. y UGT por propiciar recortes laborales

02 may 2011 . Actualizado a las 06:00 h.

Menos de seiscientas personas, según los datos que maneja la Policía Local, salieron ayer a la calle en Ourense para celebrar la fiesta «máis triste» de los trabajadores. El Primero de Mayo en la capital sirvió para ahondar en la división entre los principales sindicatos. Con una diferencia de media hora, y como ya es habitual en los últimos años, salieron las dos manifestaciones convocadas. En primer lugar, la CIG, y detrás de ellos CC.OO. y UGT. En ambos casos, el poder de convocatoria fue similar y rondó los trescientos manifestantes cada una.

La división entre las tres centrales sindicales no se demostró solo visualmente. También llegó en esta ocasión a los discursos. En concreto, el secretario comarcal de la CIG, Etelvino Blanco, aprovechó su intervención para cargar contra Comisiones y UGT. «Non me pregunten por que outros se manifestan. A súa política sindical é a que propicia os recortes aos traballadores».

En su ataque, el líder del sindicalismo nacionalista en Ourense calificó de «cínicos» a los líderes de ambos colectivos, ya que entiende que «renunciaron ao sindicalismo de clase porque non teñen autonomía suficiente e negociaron prebendas para eles e as súas organizacións». El ataque lanzado por la CIG no encontró respuesta minutos después en la concentración de los otros dos sindicatos.

Más allá de su enfrentamiento, las tres centrales sindicales aprovecharon el Primero de Mayo para mostrar su rechazo a las reformas laborales, el recorte de derechos y salarios o el retraso en la edad de la jubilación. Entre las principales demandas destacaron la petición de empleo estable y una reforma fiscal que sea «xusta e equitativa».

Críticas a la Xunta

Buena parte de los dardos enviados por los manifestantes y sus líderes tuvieron como destinatario el gobierno de la Xunta, que preside Alberto Núñez Feijoo. En la provincia de Ourense se censuró la promesa del Plan Impulsa que, en palabras de Etelvino Blanco, «so impulsa a que os mozos teñan que emigrar de Ourense».

También hubo lugar en las concentraciones para acordarse de empresas que se encuentran en su situación delicada con motivo de la crisis. La CIG, por ejemplo, respaldó a los trabajadores de la empresa Vidrio, que llevan cinco meses sin cobrar. Por su parte, CC. OO. y UGT censuraron el cierre del hospital de Toén.

«Estamos ante o ocaso dese sindicalismo plegado que da os seus últimos pasos como sindicalismo de clase»

«A Deputación é a única que crea emprego na provincia, pero hai que ir co carné do PP nos dentes»

Etelvino Blanco

«A reforma laboral en Ourense non crea emprego, senón que abarata o despido»

«En Ourense temos 28.000 persoas en paro e un goteo constante de expedientes de emprego. Hai 6.000 parados máis desde que empezou a crise económica na provincia»

CC. OO. y UGT