Vinis Terrae retoma el pulso del sector con compradores de un total de 25 países
OURENSE
«Vinis Terrae es una feria necesaria en el momento más oportuno para las bodegas gallegas». Esta reflexión de Juan Manuel Casares, presidente del Consello Regulador de la D. O. Ribeiro resume las ganas y la necesidad que tenía el sector de reencontrarse con los centros de negocio tras el momento más duro de la pandemia y de las restricciones. Y es que las pérdidas en el canal horeca durante el 2020 superaron el 50 % para el sector. La novena edición de esta feria -la segunda presencial que se celebra en Expourense tras el fin del estado de alarma- se mantiene como una cita 100 % profesional, gallega y de calidad. Cuenta con la participación de 69 bodegas adscritas a las cinco denominaciones de origen gallegas, siendo cuatro de ellas ourensanas (Ribeiro, Monterrei, Ribeira Sacra y Valdeorras). A estas se suman Rías Baixas, el Consello Regulador de Licores y Aguardientes de Galicia y las IXP de vinos de Galicia, como es el caso de Val do Miño, Barbanza e Iria y Ribeiras do Morrazo.
Hasta este martes a las 18.00 horas, cada una de estas 69 bodegas tiene programadas citas de negocio con potenciales compradores o importadores de 25 países. Debido al escenario sanitario actual, gran parte de ellas se realizarán de manera telemática. Para muchos de estos importadores será su primera vez en este salón. «Se ha realizado una selección muy exhaustiva de los tomadores de decisión y de los mercados de los que proceden trabajando, sobre todo, con Europa. La idea es posicionar a esta cita como una herramienta de exportación al servicio de las bodegas», explicó el director gerente de Expourense, Rogelio Martínez.
Herramientas digitales
Habrá actividades formativas para dotar a las bodegas de herramientas digitales para optimizar su comercialización a través de canales en línea o redes sociales. Dos de estos talleres están organizador por la Evega, uno con Instagram en el centro del análisis, y otro en el que se aportan claves para la reinvención de las empresas vitivinícolas. Ambos son en formato presencial.
También hubo un curso este lunes sobre la digitalización de experiencias en bodegas y cómo la tecnología puede ayudar a incrementar las ventas, de mano de la firma UpWine. Presentó su modelo para digitalizar las tradicionales catas y visitas de enoturismo en innovadoras experiencias digitales de usuario. Su propuesta es más completa que opciones como Zoom o Youtube l dar la posibilidad de interactuar con el usuario y ofrecer información al consumidor.