La MIT arranca con una mirada al pasado

Fina Ulloa
Fina Ulloa OURENSE / LA VOZ

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Los premiados, en el centro de la imagen con sus galardones, junto a los representantes instituciones y los organizadores de la MIT
Los premiados, en el centro de la imagen con sus galardones, junto a los representantes instituciones y los organizadores de la MIT Santi M. Amil

La organización de la Mostra Internacional de Teatro de Ribadavia homenajeó al periodista y docente Luis Álvarez Pousa; y al director, dramaturgo y productor teatral Eduardo Alonso.

16 jul 2023 . Actualizado a las 05:00 h.

Ya se había anunciado. El lema de la Mostra Internacional de Teatro de Ribadavia este año es «Memoria, cohesión e innovación». Y ya en los primeros compases de la 39 edición de este festival de la escena se cumplieron todas. La MIT abrió oficialmente echando la vista atrás. Y no solo porque en este año se conmemora el medio siglo desde la primera Mostra del colectivo Abrente, que se considera el germen tanto de este como de otros muchos festivales impulsores del teatro gallego. La cita inaugural miró al pasado para rendir homenaje a dos personas a las que se les reconoce un papel fundamental en la modernización del sector: El periodista y docente Luis Álvarez Pousa; y el director, dramaturgo y productor teatral Eduardo Alonso. Ambos recibieron en la tarde del sábado el Premio de Honra Roberto Vidal Bolaño, la más alta distinción que otorga la organización del festival que dirige Roberto Pascual.

A los dos elegidos de este año se les agradecen muchas cosas pero de Álvarez Pousa se destacó especialmente su labor como director xeral de Cultura en 1984 y su intensa actividad modernizadora de la política cultural gallega. Entre otras cosas, fue el impulsor de la creación de estructuras como el Centro Dramático Gallego. A Eduardo Alonso el reconocimiento destacó no solo su prolija actividad como creador sino también el haber estado detrás del nacimiento del Instituto Galego das Artes Escénicas e Musicais. Acompañándolos en el acto estuvo el conselleiro de Cultura, Román Rodríguez, que aprovechó para alabar la capacidad de la MIT para proteger y promocionar el talento escénico de Galicia. La cohesión con el presente y el futuro llegó poco después, con la apertura del telón del festival en el audiotorio del castillo ribadaviense. La compañía de Marina Otero, en coproducción con el Festival Internacional de Buenos Aires, puso en escena el espectáculo Fuck me