Un plan piloto recupera soutos tradicionales en tres municipios de la provincia de Ourense

La Voz OURENSE / LA VOZ

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ALEJANDRO CAMBA

En la localidad de Parada de Sil nace la primera agrupación forestal conjunta

18 dic 2023 . Actualizado a las 05:00 h.

Recuperar y conservar los soutos tradicionales y mejorar su gestión para que sean espacios sostenibles y rentables. Es el objetivo del plan piloto que ha puesto en marcha la consellería de Medio Rural y que tiene un fiel reflejo en el municipio de Parada de Sil. Hasta esa localidad se trasladó este domingo el conselleiro José González, que se reunió con el alcalde de la localidad, Aquilino Domínguez, y con la presidenta de la asociación de propietarios de soutos Canón do Sil. Mónica Bizarro, así como un grupo de integrantes de esta entidad, recorrieron algunos de los espacios de castaños del municipio, en el que se va a poner en marcha una agrupación forestal de gestión conjunta, una figura recogida en la ley de recuperación de la tierra agraria de Galicia.

Y es que los propietarios de la entidad serán los primeros en constituirse en la comunidad gallega bajo esta figura, firmando un contrato con la Xunta para una gestión durante 10 años. González destacó durante la visita que este paso incidirá en la mejora de estos espacios tradicionales tan representativos del bosque gallego, un fin que se persigue con el programa estratégico del castaño y de la producción de castañas que el gobierno gallego ya ha puesto en marcha.

El plan cuenta con cinco ejes de intervención y un total de 36 acciones que se llevarán a cabo hasta el año 2040 para fomentar la conservación de los bosques de castaños en la comunidad. El titular de Medio Rural destacó que el proyecto de Parada de Sil se integra en un plan piloto para recuperar estos cultivos del que forman parte otras zonas de la provincia de Ourense. Se trata de los soutos de Tuxe y Cambela, en el municipio de O Bolo, así como del Souto de Prada, en A Veiga. También están inmersos en este programa dos ayuntamientos de la provincia de Lugo.

En total, este proyecto ha permitido actuar en una superficie de 356 hectáreas, después de realizar una inversión de 131.500 euros. Casi 30.000 de ellos han recaído en Parada do Sil, donde la superficie de castaños se prolonga a lo largo de 100 hectáreas.

Fomentar el asociacionismo entre los propietarios de los terrenos es una medida con la que se pretende llamar la atención sobre otros dueños de montes de estas características, que podrían sumarse a una iniciativa. Luchar contra el abandono de este tipo de montes y recuperarlos es un objetivo que también se considera crucial para luchar contra los incendios forestales. «O noso obxectivo é recuperar estes soutos extraordinarios que teñen non só un aproveitamento de rendibilidade por las castañas que caen, senón tamén un valor paisaxístico, etnográfico e turístico» dijo el conselleiro en Entrambosríos, donde hay un castaño milenario inventariado.