Luca Lucaroni, campeón del mundo de patinaje artístico: «Nada te asegura ganar, no tengo una varita mágica»
OURENSE

El técnico, que ahora ejerce de entrenador en Italia, impartió una tecnificación en O Carballiño organizada por el Club Aehde
15 abr 2024 . Actualizado a las 19:36 h.Luca Lucaroni, trece veces campeón del mundo de patinaje artístico y ahora entrenador en Italia, impartió una tecnificación de tres días en O Carballiño bajo la organización del Club Aehde. Lucaroni cree que debe aprovechar su condición de referente para ayudar a crecer a un deporte duro y sacrificado que lucha por la condición de olímpico. Recuerda el italiano que el patinaje es un deporte de caer y levantarse y que cada vez que un patinador lo consigue es un triunfo y una lección de vida.
—¿A qué dedica su vida después de competir?
—Ahora estoy del otro lado, ejerciendo de entrenador. Tengo atletas de la selección, estoy comenzando un nuevo recorrido y la verdad es que me gusta mucho. Tengo ganas de saber cómo es mi futuro y mi sueño es tener patinadores campeones del mundo como entrenador.
—¿Qués es más complicado, ser entrenador o patinador?
—Más complicado entrenador, porque en el momento que el patinador está en la pista, tú ya no puedes hacer nada. Para mí era más fácil ser patinador.
—Comenzó a patinar a los cuatro años, ¿cuál fue el motivo?
—Tengo dos hermanas mayores y aunque yo quería ser futbolista, mi padre me dijo que tenía que intentar hacer otra cosa y a partir de ahí, le dediqué toda mi vida, cada día y cada momento, al patinaje.
—¿Cuándo se dio de cuenta de que el patinaje artístico era su pasión?
—Cuando dejé mi casa de Perugia para irme a vivir a Roma. En ese instante me dije que ya que cambiaba mi vida, quería realizar mi sueño, que era ser campeón del mundo. Ese fue el momento más importante de mi carrera.
—¿Por qué es un deporte tan duro el patinaje?
—Para mí es un deporte muy completo. Muy difícil, porque tiene muchas cosas, no solo una. Aquí entra la técnica, la interpretación, la parte artística... todo. No es solo un ejercicio físico. Le tienes que transmitir a la gente que tú estás haciendo una cosa que no es un ejercicio técnico.
—¿Qué es más difícil para un patinador, la técnica, la interpretación, los nervios de la competición...?
—Yo creo que la interpretación, porque tienes que nacer con ella. La técnica, si una persona trabaja, puede aprendérsela, pero si uno no tiene la interpretación dentro, es más difícil llegar a un nivel alto.
—¿Para usted que debe tener un buen patinador?
—No hay una clave que te asegure ganar, nadie tiene una varita mágica. Tiene que estar en un nivel alto en todo, en piruetas, saltos y coreografía y eso no es fácil. Trabajar todo eso es muy complicado y cansa mucho. Los entrenadores lo único que podemos hacer es trabajar, explicar a los jóvenes cómo tienen que hacer las cosas.
—¿Cree que el patinaje está lo suficientemente valorado por la gente ajena a este deporte?
—Sí. Pienso que es un deporte más difícil que otros muchos, pero no podemos hacer una comparación con el fútbol o con el tenis. Pienso que el sacrificio que hacemos los patinadores es tan grande como el que más. Creo que uno de los problemas es que no es olímpico.
—¿Considera que llegará a serlo?
—Espero que sí. El problema creo que es un poco político, porque hay potencias como Rusia, China o Japón que en estos momentos no tienen un buen nivel en el patinaje sobre ruedas. La suerte es que ahora la federación de World Skate es olímpica y eso nos da alguna esperanza de cara al futuro.
—¿Qué piensa cuando le llaman el Messi del patinaje?
—Para mí es un honor, es una cosa buena. Al inicio, cuando empezaron a llamarme así, decía que no, pero me gusta.
—¿Qué futuro le augura al patinaje artístico?
—Espero que sea más visible en un futuro. Yo intento ayudar si puedo.
—¿Qué tal estancia en O Carballiño?
—Bien. Los chicos trabajaron con mucho intereés.
—¿Qué piensa que puede aportar en este tipo de iniciativas?
—Es bueno que alguna vez cambie el entrenador, porque para los niños es un estímulo. Cuando yo era niño, y había iniciativas de este tipo, me estimulaba. Pienso que este tipo de iniciativas ayuda a los chicos.
—¿Qué cree que debe enseñar un entrenador?
—A mí me gusta mucho hablar con los niños. Yo quiero trabajar bien y si los niños comprenden bien, a mi me resulta más fácil. Yo quiero ayudar a la gente, y como campeón del mundo y referente, creo que para ayudar al patinaje tengo que hacer eso.
—¿Qué le diría a una persona que no hace patinaje para que se anime a probar?
—Que es un deporte en el que se cae mucho y en el que se hace mucho daño. A mis patinadores pequeñitos siempre les digo una cosa: ‘Cada vez que uno cae y se levanta, es siempre un triunfo personal’. Yo creo que el deporte es una ayuda para seguir adelante en la vida.