Sergio Pérez, director deportivo del COB: «Un buen equipo no se hace con los mejores jugadores, sino con los adecuados»

Maite Rodríguez Vázquez
maite rodríguez OURENSE / LA VOZ

OURENSE

Sergio Pérez Anagnostou, director deportivo del Club Ourense Baloncesto.
Sergio Pérez Anagnostou, director deportivo del Club Ourense Baloncesto. Miguel Villar

El director deportivo del COB defiende crecer con bases sólidas

15 jun 2024 . Actualizado a las 01:03 h.

El Club Ourense Baloncesto está inmerso en el cierre de temporada, con las gestiones que hay que terminar antes del 30 de junio. Ello no quiere decir que en las oficinas del Pazo no tengan la vista puesta ya en la preparación de la próxima temporada. Sin embargo, la definición del marco económico y del presupuesto aproximado que va a tener el club es la prioridad, antes que dar nuevos pasos en el proyecto deportivo. Es por esto que, según explica el director deportivo, Sergio Pérez Anagnostou, el asunto del entrenador está «parado» hasta tener el nuevo presupuesto definido. El proyecto económico ha de ser «convincente» para empezar a hablar con un entrenador —que será Félix Alonso en primera instancia— al que poder ofrecerle «una plantilla competitiva».

Así las cosas, estas son semanas en las que el equipo comercial del club está centrado en profundizar en las gestiones con empresas colaboradoras o patrocinadoras. «El trabajo del equipo comercial es excelente y nos va a permitir conseguir un presupuesto mayor», asegura el director deportivo. Pérez Anagnostou subraya que el vínculo del COB con las empresas que colaboran con el club es bueno y que se está ampliando ese tejido de apoyos económicos y diversificando los soportes publicitarios con iniciativas como el club de empresas o el establecimiento colaborador, además de los patrocinios clásicos. También la campaña de socios, ya abierta para renovaciones, va con buen ritmo. En ese sentido, el director deportivo considera que estas dos últimas semanas de la temporada son importantes.

Aparte de tener que trabajar en estas cuestiones, lo cierto es que por ahora el mercado no ofrece demasiado movimiento, aprecia Pérez. «Los siguientes pasos tendrían que ser con el entrenador ya de la mano», asume el director deportivo del COB. Sergio Pérez Anagnostou defiende la estructura de equipo que se hizo el año pasado y considera que sirvió para solventar las situaciones que se fueron dando. Asegura que al contar con una plantilla de doce jugadores y al no haber habido lesiones de larga duración, se pudo gestionar para que los que habían tenido menos minutos de juego diesen un paso adelante. «Había versatilidad en la plantilla y confianza en los jugadores. Se pudo manejar bien», observa.

Sergio Pérez afirma que es el momento de que el club dé «pasos cortos y sólidos para seguir creciendo año tras año». El director deportivo del Club Ourense Baloncesto cree que el éxito de equipos como Lleida o Coruña en la última temporada es un ejemplo de que la continuidad en el trabajo acaba dando sus frutos. Sobre los play off, Pérez Anagnostou comenta que Estudiantes partía con cierta ventaja por jugar en casa y aunque ambos equipos estaban en buen estado de forma, Tizona no tuvo el día. En la otra semifinal, se medían dos conjuntos «en excelente racha y bien trabajados», si bien «Lleida jugó mejor el final de partido contra San Pablo». Ya en la final, Sergio Pérez vio a un equipo, Lleida, «con las ideas clarísimas desde el principio y Estudiantes estuvo nadando contra corriente».

Para Pérez, el éxito de Lleida consolida el trabajo de tres años atrás, con «todos jugando de memoria, como un reloj». Y eso que no era uno de los favoritos en el arranque de la liga por presupuesto, ni tampoco Coruña, del que destaca que realizó una «soberbia temporada». Para el director cobista, «un buen presupuesto da seguridad, pero no garantías». De los descendidos de ACB en los últimos cuatro años, solo Andorra volvió a ascender. «Los demás siguen en Primera FEB», ejemplifica. «Todo el mundo tiene algo que decir, es un trabajo diario. Hay que tener continuidad y paciencia, sin presiones ni agobios. Un buen equipo se hace no con los mejores jugadores, sino con los adecuados», concluye.