Cae una banda que asaltó viviendas, robó en comercios y se llevó tabaco por valor de 100.000 euros de varios estancos de la provincia de Ourense

Marta Vázquez Fernández
M. Vázquez OURENSE

OURENSE

Guardia Civil

Tres de los sospechosos están en prisión acusados de participar en un robo muy violento ocurrido en Lobios

19 jun 2025 . Actualizado a las 17:24 h.

Tres de los sospechosos que el pasado mes de febrero fueron detenidos por su participación en el violento robo sufrido por un constructor de Lobios acumulan en su currículo un prolífico historial delictivo. Los agentes de la Guardia Civil han encontrado indicios de que no solo se vieron involucrados en aquella brutal paliza a un indefenso septuagenario al que luego robaron dinero y joyas, sino que mucho antes de eso ya habían perpetrado otros hechos delictivos que les reportaron cuantiosos beneficios y en los que no les importó usar la violencia. Las pistas que fueron dejando a lo largo de varios meses por distintos puntos de la provincia ayudaron a los investigadores del instituto armado, que a lo largo del 2024 pusieron en marcha dos operaciones diferentes que acabaron cruzándose, al encajar en ambas los mismos delincuentes. Se presume que tenían pocos escrúpulos y que demostraban la misma habilidad para asaltar estancos que para robar cobre. Ahora todos están ya bajo la lupa de las autoridades judiciales. 

Una de las operaciones arrancó en septiembre del año 2024, cuando un vecino de Xinzo de Limia acudió al cuartel para asegurar que habían robado tres veces en su casa, asegurando que en el primer intento le habían quitado 30.000 euros y en el último los delincuentes lo maniataron para llevarse otros 300 euros. El denunciante tenía sospechas de que un matrimonio con el que durante años había tenido una estrecha relación de amistas podría estar detrás de los extraños sucesos que le habían ocurrido, y aportó sus nombres a los agentes. Estos empezaron a tirar del hilo y pronto descubrieron que la pareja, y el hijo de ambos, todos ellos residentes en Xinzo pero con negocios en Baltar, tenían contactos con sospechosos ya conocidos, así que comenzaron a hacer averiguaciones. Se supo así que se trataba de una banda integrada por nueve personas en la que cada uno tenía su rol preestablecido. Mientras unos se dedicaban a obtener información de las víctimas, otros organizaban los asaltos y los perpetraban.

Esa investigación explotó esta misma semana. Bautizada con el hombre de Sargento Moreiras, una denominación que vincula la calle en la que tienen su negocio algunos sospechosos y el lugar en el que residen, han sido detenidas cinco personas e investigadas otras cuatro. Se trata del matrimonio de Xinzo y su hijo, de 48, 54 y 22 años, y de dos sospechosos más, una vecina de Ourense y un hombre residente en A Coruña. No fue necesario detenerlos porque ya estaban bajo custodia de las autoridades, a otros tres sospechosos. Se trata de tres de los implicados en el robo violento de Vilameá y entre ellos se encuentra un trabajador de los servicios informáticos del concello antelano, Jorge G. Y. Al noveno sospechoso, de 40 años y residente en Vilar de Barrio, se le atribuye un delito de receptación.

Se cree que todos estuvieron involucrados no solo en el robo denunciado por el vecino de Xinzo, sino también en otros tres delitos de robo con fuerza en estancos de Castrelo de Miño, Celanova y Froufe (Baños de Molgas), que saldaron con la sustracción de tabaco por valor de 100.000 euros. También se les relaciona con otros tres asaltos en otros tantos establecimientos comerciales y restaurantes de Luíntra (Nogueira de Ramuín)  y Ribadavia. En estos casos, se llevaron la recaudación de las cajas registradoras. Se les atribuye a todos ellos la pertenencia a grupo criminal, y tenencia ilícita de armas.

Incendio de O Pereiro de Aguiar provocado por la quema de cobre
Incendio de O Pereiro de Aguiar provocado por la quema de cobre GUARDIA CIVIL

Pero la historia no termina aquí. Mientras los agentes del equipo de policía judicial le seguían la pista a los ladrones, los funcionarios del Seprona trataban de esclarecer lo que se ocultaba tras un grave incendio forestal registrado en mayo del 2024 en el municipio de O Pereiro de Aguiar. Tras quedar extinguidas las llamas los uniformados descubrieron la presencia de restos de cobre y no pasaron por alto este detalle. Relacionaron las sustracciones que se habían realizado en diversos puntos de las provincias de Lugo, A Coruña y Ourense y pronto relacionaron todo esto con cuatro sospechosos. Dos de ellos, Petrica S. e Ionel H., son los mismos que figuran como investigados en la operación Moreiras. Se cree que se dedicaban a robar el cobre y que, para que alcanzara su máximo valor, lo quemaban usando acelerantes de fuego y en horario nocturno. Luego lo preparaban para la venta en el mercado negro, intuyendo los investigadores que el destino final eral Portugal.